Si preguntas a cualquier familia española, sus componentes te confirmarán que en la inmensa mayoría de los casos son las mujeres las que manejan la economía doméstica. Las madres del hogar controlan todos los ingresos y manejan los distintos gastos comunes que realiza la unidad familiar, alimentación, desembolsos en hijos, recibos…
En la vida pública ocurre todo lo contrario. La Infanta Cristina, la primera “miembra” de la familia real española que pasa por el Juzgado, no sabía nada de lo que ocurría con las finanzas de su hogar compartido con Iñaki Urdangarín. Cristina de Borbón gastó 265.000 euros de la trama. 533 veces utilizó frases y expresiones evasivas para responder a las preguntas de la fiscalía durante su declaración ante el juez Castro.
Ana Mato, exministra de Sanidad con el Partido Popular, declaró no tener constancia sobre los chanchullos económicos que realizaba su marido, a quien culpó por implicarla. Ana Mato no llegó a ver el Jaguar que guardaba su esposo en el garaje.
¿Pero son solo las representantes de la casta de centro-derecha y monárquica las únicas que no conocen lo que ocurre con las cuestiones económicas que les afectan en el día a día?
Manuela Carmena, la representante del pueblo en la alcaldía de Madrid, afirma desconocer que su marido, Eduardo Leira, puso a su nombre un patrimonio de más de 800.000 € mientras adeudaba una cantidad cercana al medio millón a los trabajadores de su empresa, tras haberse declarado insolvente para eludir el pago. Carmena, con un patrimonio de 2,5 millones € y un sueldo anual de más de 100.000 €, nunca habla del tema en público.
Tania Sánchez, la ex de Pablo Iglesias, atestiguó ignorar que favoreció a su hermano con un contrato mientras era edil del Ayuntamiento de Rivas. La cooperativa de Héctor Sánchez se lucró gracias al voto de Tania y de su padre (también edil) con una cantidad de 137.000 €. En su declaración en el Juzgado, Tania Sánchez confirmó que no sabía que Héctor era el único administrador de la empresa contratada.
Más curioso es el caso de la exconcejal de Podemos en Puerto Real, que fue procesada por haber participado en una estafa millonaria de una empresa que ofrecía contratos de trabajo a cambio de dinero. Mónica Gónzalez, administradora única de Eurowork, fue absuelta tras declarar que no sabía nada, que simplemente pretendía ayudar a los inmigrantes.
Para finalizar, la actriz Ana Duato, investigada por fraude fiscal junto a su compañero Imanol Arias, manifestó en el Juzgado desconocer estar cometiendo irregularidades a través de sus declaraciones de la renta. Según la Fiscalía Anticorrupción, Duato no habría tributado 795.000 € entre 2010 y 2012.
Mientras tanto, Isabel Pantoja, más sabia, fue condenada a una pena de prisión de dos años y a una multa de 1.147.148, 96 euros por blanqueo de capitales durante su relación con el exalcalde de Marbella Julián Muñoz. El Tribunal Supremo reiteró que la cantante conocía el procedimiento ilícito del dinero que Muñoz había ingresado en sus cuentas bancarias.
“El que no sabe es un imbécil. El que sabe y calla es un criminal”. Bertolt Brecht
