El Departamento de Estado de EEUU reconoce el difícil trabajo de las Fuerzas de Seguridad para detener la ofensiva yihadista contra España.
“Las capacidades antiterroristas españolas, coordinadas por el Centro de Inteligencia Contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), han demostrado ser eficaces”. Así aparece reflejado en el informe sobre terrorismo que el Departamento de Estado de Estados Unidos elabora anualmente.
Y es que, como ya publicó La Gaceta, la ausencia de ataques en España “no es simple casualidad”. Fuentes policiales consultadas por este medio reconocían que “si no se han producido ataques yihadistas en España es gracias a la eficacia de las Fuerzas de Seguridad en la lucha contra el terrorismo”.
El documento analiza la situación a lo largo de 2016 e incluye un balance de Europa en el que establece una valoración conjunta del continente y detalla después el estado de cada uno de los países.
España colaboró ‘activamente’ con EEUU
El Gobierno de Donald Trump ha puesto en valor los esfuerzos de España contra las redes que reclutan a extranjeros para grupos como el Estado Islámico y Al Qaeda, así como su “cercana” cooperación con los países del norte de África en la lucha antiterrorista.
La colaboración judicial y policial de España y Marruecos en esta batalla es un ejemplo claro: ha permitido la desarticulación de numerosas células integristas e impedido el reclutamiento de nuevos adeptos para el ISIS.
El informe menciona, por otro lado, que el pasado año España colaboró «activamente» con el Departamento de Interior de Estados Unidos para desmantelar redes terroristas.
«Las autoridades españolas mantuvieron un sólido intercambio de información con sus homólogos estadounidenses sobre amenazas terroristas y trabajaron estrechamente con sus socios regionales, como Marruecos y Argelia, para desmantelar las redes terroristas de reclutamiento«, afirma.
‘Liderazgo’ en la lucha contra la financiación del terrorismo
También se refiere el texto a la actual ley contra el blanqueo y la financiación del terrorismo, que data de 2010. De esta indica que “mejora en gran medida la capacidad de las autoridades para atacar la financiación del terrorismo por la vía de imponer a las instituciones financieras y otras empresas mayores requisitos y penas más duras para los incumplimientos”.
«España investiga y persigue eficazmente la financiación terrorista y utiliza medidas de decomiso para congelar los activos terroristas», dice EEUU, a la vez que destaca que, en 2016, España “siguió demostrando liderazgo en el área de antiblanqueo y contra la financiación del terrorismo”.
El Departamento de Estado cita además al Programa Nacional para prevenir la radicalización, liderado por el CITCO y con Málaga como escenario de una iniciativa piloto de intervención interdisciplinar. La línea puesta en marcha para denunciar de forma anónima casos de radicalización ha recibido, según han informado las autoridades españolas, 900 llamadas “de interés” desde diciembre de 2015.
Hitos de la lucha antiterrorista en España
Hace además un repaso de varios hechos clave de la lucha antiterrorista en España en 2016, como la incautación de 20.000 uniformes militares que iban a ser enviados desde Valencia y Algeciras al Estado Islámico o al Frente al Nusra. También alude a la cooperación con Bélgica y Alemania que permitió desmantelar una red de reclutamiento el pasado mes de septiembre o al hecho de que el Centro Europeo contra el Terrorismo -creado en enero- esté dirigido por el coronel de la Guardia Civil Manuel Navarrete Paniagua.
‘Contribuyente significativo’ a la coalición internacional contra el EI
España ha sido, según la diplomacia estadounidense, un «contribuyente significativo» a la coalición internacional liderada por Estados Unidos y que lucha contra el EI en Siria e Irak.
El informe detalla que España, a lo largo de 2016, ha enviado a más de 300 militares a la Base Gran Capitán de Besmayah -a unos 45 kilómetros de Bagdad- para entrenar a las Fuerzas de Seguridad iraquíes que luchan contra los yihadistas del Estado Islámico.
El documento recoge la decisión del Consejo de Ministros el 9 de diciembre de 2016 de solicitar autorización al Congreso de los Diputados para el despliegue en Irak de efectivos de la Guardia Civil, así como el incremento del personal de las Fuerzas Armadas españolas.
«En diciembre, el Consejo de Ministros de España aprobó el despliegue de 150 agentes policiales y del cuerpo militar para apoyar los esfuerzos de entrenamiento de la coalición«, reza el informe.
La mayoría de los retornados, en prisión
Además, desde que se elevó la alerta antiterrorista en junio de 2015 -a un nivel 4 en una escala de 5- se ha detenido a 177 sospechosos de yihadismo, según datos de las autoridades españolas. Informan asimismo de que desde España han viajado a Irak y Siria un total de 204 personas para luchar en las filas del EI. «Varias docenas», añade, se dan por muertos y la mayoría de los retornados, alrededor de 25, están en prisión.
Experiencia adquirida tras décadas de asesinatos de ETA
La eficacia de las Fuerzas de Seguridad españolas en la lucha antiterrorista se debe, tal y como reivindicaron las fuentes consultadas por La Gaceta y reitera ahora el Gobierno de EEUU, a la experiencia adquirida tras décadas de asesinatos de ETA y tras haber sufrido los ataques islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid.
“A causa de la larga lucha contra ETA, España tiene un marco legal antiterrorista maduro”, señala el documento, que también recoge que la banda terrorista de ultraizquierda no ha lanzado ningún ataque desde que en 2011 anunció “el cese definitivo de la actividad armada”.
El Departamento de Estado del país norteamericano advierte que ETA no se ha disuelto formalmente, pero reconoce que “su coherencia se vio aún más erosionada” con la detención en noviembre de 2016 en Francia de su último jefe, Mikel Irastorza. Este había sustituido en 2015 en la cúpula de la organización terrorista a David Pla e Iratxe Sorzabal.
El pasado mes de marzo, cuando ETA anunció la farsa del desarme –calificado como “circo” y “espectáculo” por las víctimas del terrorismo– que escenificó el 8 de abril en Bayona (Francia), Estados Unidos rechazó manifestarse al respecto. Noel Clay, portavoz de la diplomacia estadounidense, aseguró entonces que no estaba “en posición de determinar su seriedad, validez o intención”.
ETA ha tenido una trayectoria de más de medio siglo de violencia, con el asesinato de al menos 856 personas, decenas de secuestros y extorsión a numerosos empresarios para recaudar fondos. Cabe recordar además que la Guardia Civil es el Cuerpo en el que más víctimas ha provocado ETA: 230.
Inversión en personal y en tecnología
El éxito de esta efectividad también se debe a “la inversión en personal y en tecnología”. Después del 11-M, relataron las fuentes consultadas, “se reforzó a todos los niveles la Brigada de Información y se especializó en diferentes grupos terroristas… así, existe un grupo específico que se dedica exclusivamente a terrorismo yihadista y que a su vez está dividido en diferentes especialidades: desde redes sociales a materia operativa”.
La gran inversión en tecnología ha facilitado que los servicios de Información dispongan de los mejores medios técnicos para hacer frente al terrorismo islamista. Es el caso del sistema I3, que como avanzó el pasado año el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, permite realizar un seguimiento “más eficaz” a través de las redes sociales contra la amenaza del yihadismo.
Por otro lado, la necesidad de optimizar la lucha, mejorar la gestión de recursos y evitar duplicidades en la Administración llevó al Gobierno a aprobar en 2014 la creación del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). Su función consiste en “la recepción, integración y análisis de la información estratégica disponible en la lucha contra todo tipo de terrorismo y radicalismo violento, así como el diseño de estrategias específicas contra estas amenazas”.
Además, a través de la iniciativa STOP RADICALISMOS, los ciudadanos pueden colaborar a través de una serie de canales a su disposición para que, de forma confidencial y segura, notifiquen a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad aquellos posibles casos de radicalización en su entorno a través de la página web www.stop-radicalismos.es, la aplicación móvil de alertas de seguridad ciudadana Alertcops y el teléfono gratuito 900 822 066.
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