«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
EN UN ENTRENAMIENTO

Javier Mascherano denuncia el robo de joyas y relojes a la selección argentina en París

Javier Macherano. Europa Press

La selección de Argentina inició su andadura olímpica con derrota en el primer partido de los Juegos Olímpicos de París, en un desenlace insólito. Inicialmente, parecía que un gol de Cristian Medina a los 116 minutos sellaba un empate 2-2, pero tras la aparente conclusión del partido, el tanto fue anulado por fuera de juego. Dos horas después, se reanudó el encuentro para completar el tiempo restante, terminando definitivamente en un 1-2.

Javier Mascherano, entrenador del equipo argentino, calificó lo sucedido en el campo como un escándalo. «Lo que ocurrió fue inadmisible», expresó refiriéndose a la reanudación del partido después de que el VAR confirmara la posición adelantada en la última jugada y el árbitro sueco Glenn Nyberg decidiera que aún faltaban tres minutos por jugarse.

La polémica no terminó ahí. Mascherano, visiblemente molesto, añadió: «Ayer durante el entrenamiento nos robaron. A Thiago Almada le sustrajeron un reloj y anillos… Nos exigen credenciales para todo, pero luego ocurren estas cosas». Subrayó repetidamente la seriedad del evento: «Esto no es un torneo de barrio, son los Juegos Olímpicos«.

El partido también se vio interrumpido en numerosas ocasiones por problemas de seguridad, ya que durante la segunda mitad, el juego fue detenido «siete veces porque personas ingresaron al campo». «No tengo una explicación para lo que ocurrió, nunca me sucedió algo así como jugador», concluyó Mascherano.

Esto, pese a que tal y como adelantó LA GACETA Macron optó por expulsar de la capital francesa a más de 100.000 inmigrantes sin techo para evitar posibles conflictos. Los inmigrantes afirmaron que se les prometió alojamiento en otros lugares, pero terminaron viviendo en calles desconocidas lejos de sus asentamientos anteriores o incluso siendo señalados para deportación.

El presidente Macron aseguró entonces que los Juegos Olímpicos serían una muestra de la grandeza de Francia. Sin embargo, la Villa Olímpica se construyó en uno de los suburbios más empobrecidos de París, donde miles de personas viven en campamentos callejeros, refugios o edificios abandonados. Ya se notan las consecuencias a dos días de la inauguración del evento internacional.

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