El Sistema de Seguridad Social ha incrementado su deuda, creciendo en 10.000 millones de euros en tan sólo un mes, lo que eleva el total a 126.177 millones de euros. Según los datos publicados por el Banco de España, el aumento se debe principalmente a los préstamos concedidos por el Estado a la Tesorería General de la Administración para financiar su desequilibrio presupuestario provocado por el sistema de pensiones.
Las transferencias del Gobierno de Pedro Sánchez han superado los 56.000 millones de euros en 2024, acumulando desde el año 2018 cerca de 328.000 millones de euros, un 21% del PIB del año pasado. Sin embargo, la Seguridad Social sigue manteniendo un déficit del 0,4% del PIB, un porcentaje superior a las aportaciones anuales al Fondo de Reserva.

Asimismo, los ingresos por cotizaciones sólo cubren nueve meses de gasto en pensiones y el patrimonio neto de la Seguridad Social asciende a más de 350.000 millones de euros negativos entre deuda y transferencias. En este contexto, mientras los ingresos no financieros han aumentado un 7,3%, los gastos no financieros han incrementado un 8,1%.
Finalmente, según el escenario base de la Comisión Europea para España en 2050, habrá seis millones más de pensionistas, un 60% más, y los mismos ocupados que 2025. Así, habrá menos de 1,4 cotizantes por cada pensionista y las perspectivas a futuro son peores. En definitiva, la reforma de las pensiones únicamente agravará el problema y sentenciará el futuro de los jóvenes españoles.