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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Cargos del PP, contra la 'línea Sémper': 'Nosotros pedimos tenerlos vivos'

¿Habrá acercamiento de presos? El PP ya «traicionó» a las víctimas con la excarcelación de sangrientos etarras como Inés del Río, Santi Potros o Bolinaga.


Las palabras del portavoz del PP vasco, Borja Sémper, sobre el posible fin de la actual política penitenciaria y de la dispersión de presos de la banda terrorista de ultraizquierda ETA han obligado al vicesecretario del PP, Pablo Casado, a salir al paso para negar la mayor y decir que «no habrá ninguna modificación de la política penitenciaria para beneficiar a los etarras una vez la banda anuncie su disolución».
Casado ha afirmado que «ETA no obtuvo ninguna contrapartida por matar y no va a tener ningún tipo de cesión por dejar de hacerlo» después de que Sémper enseñara las intenciones del PP -en línea con la política antiterrorista del Ejecutivo desde que accedió a La Moncloa en 2011-.
Cabe recordar que bajo el mandato de Rajoy fueron excarcelados sangrientos etarras como Inés del Río, Santi Potros, Alberto Plazaola o Iosu Uribetxebarria Bolinaga, secuestrador del exfuncionario de prisiones José Antonio Ortega Lara.
El dirigente vasco manifestó que «se puede adecuar a la realidad del momento» en el caso de que la banda terrorista anuncie próximamente su disolución, pero «sin prisa» y con «decisiones reflexionadas».
Sémper, que hace unos años ya dijo que «el futuro en Euskadi se tenía que construir también con Bildu», señaló que la dispersión de presos de ETA por la geografía española nació fruto de «un amplio consenso con el Partido Socialista y el Partido Nacionalista Vasco» y que en el futuro también «tendrá que partir desde un consenso similar». «Hemos aguantado a ETA 50 años, no tenemos que tener prisa ahora. No hay que precipitarse», añadió en una entrevista concedida a Servimedia.
En la entrevista, publicada tras el comunicado de ETA en el que la banda mostró su burla al distinguir entre víctimas culpables e inocentes, habló de «lucha armada», equiparó a los asesinos con los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y no se comprometió a colaborar con la Justicia para esclarecer los 300 crímenes que están impunes, también manifestó que «la legislación penitenciaria de España es de las más avanzadas de Europa en reinserción».


Desde Nuevas Generaciones, varios cargos, han manifestado su total rechazo a las palabras de Sémper. «Me niego. Ellos piden tenerlos cerca, nosotros vivos», es la reacción de Beatriz Fanjul, secretaria regional de NNGG del País Vasco.
Daniel Sualdea, presidente de NNGG Burgos, ha asegurado en declaraciones a La Gaceta que él «no se cree a ETA» porque «no ha entregado las armas, no ha pedido perdón sincero y no ayuda a esclarecer los crímenes que quedan sin resolver» para que pueda haber un final con vencedores y vencidos, y ha reclamado estar siempre con las víctimas y no «poner si acercamos o no a los presos».
Asimismo, ha recordado que el Gobierno no hizo cosas bien en política antiterrorista como la excarcelación de Bolinaga. «Hay que decirlo y ser valiente porque es lo que engrandece a un partido. La inmensa mayoría de los afiliados al PP amamos más a España que al partido», ha finalizado.
En esta misma línea, Rodrigo Mediavilla, líder de NNGG en Palencia ha dicho que «quiere creer lo que dice Casado y no lo de Sémper», es decir, que se construirá un relato «con vencedores y vencidos» porque «con los asesinos de ETA no se negocia y no puede haber acercamientos, titubeos o compadreos». «Él verá lo que dice, representa al PP vasco», ha dicho sobre Sémper.
En este sentido, ha aseverado que la dispersión ha dado resultados y que «no se accedió chantaje cuando se secuestró a Miguel Ángel Blanco» y «no se puede hacer ahora cuando ha dejado de matar». «Lo que tenemos que hacer es disolver a ETA y no permitir otra mascarada más como la del falso desarme», ha añadido.
Además, Mediavilla ha parafraseado al exdirigente popular asesinado por los pistoleros en San Sebastián Gregorio Ordóñez y ha manifestado que lo «único que se puede negociar con ETA era el color de los barrotes» de la celda.

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