Tras 20 años en prisión por ser cooperador necesario en los atentados del 11-M en los que murieron 192 personas, José Emilio Suárez Trashorras (Avilés, 1976) ha solicitado —y la ha visto denegada— la eutanasia. El exminero asturiano dirigió el pasado 1 de marzo una reclamación a la Comisión de Garantía y Evaluación del Principado de Asturias en el que solicitaba acogerse a la eutanasia. En su escrito, Suárez Trashorras alegaba un «sufrimiento insuperable» debido a la falta de atención médica adecuada en el Centro Penitenciario de Asturias.
El órgano asturiano encargado de examinar este y otros casos de personas que solicitan acogerse a la ley de muerte digna rechazó la petición de José Emilio Suárez Trashorras. El exminero lleva 20 años recluido y, en principio, se tomó su petición como un intento de llamar la atención sobre su situación carcelaria de cara a buscar algún tipo de subterfugio para acogerse a algún tipo de tratamiento en el exterior de la prisión o acceder al segundo grado penitenciario.
El comité de expertos que examinó el caso, compuesto tanto por juristas como por sanitarios, rechazó la petición porque «existe posibilidad de intervención para aliviar la situación crítica actual» del preso. Es decir, Suárez Trashorras debería de recibir tratamiento médico específico con el fin de mejorar su estado mental, que se encuentra «muy deteriorado» tras pasarse los últimos 20 años en la cárcel, según el psiquiatra que lo atiende.
Y es que tampoco ha pasado desapercibido que el reo ha solicitado una vez más acogerse al artículo 117 del Reglamento Penitenciario que permite a los presos de «baja peligrosidad» ir a centros especializados en el exterior a fin de conseguir la reeducación y la reinserción social. La petición, una vez más, fue denegada porque ello supondría salir de la prisión asturiana de Villabona, extremo totalmente descartado por Vigilancia Penitenciaria.
El exminero avilesino facilitó la dinamita —más de 200 kilos— para los atentados del 11-M que costaron la vida de 192 personas y más de 1.000 resultaron heridas, en lo que ha sido el mayor atentado en la historia de España. Por estos hechos fue condenado a 34.175 años de cárcel. Actualmente realiza trabajos en la biblioteca de la prisión.
