El Gobierno de Pedro Sánchez ha publicado una convocatoria de ayudas públicas para proyectos de capacitación en internet. A través del programa «Reto Rural Digital», el Ejecutivo ha convocado estas ayudas por valor de 21 millones de euros que se adjudicarán a aquellas asociaciones sin ánimo de lucro que oferten cursos de 7,5 horas en competencias tecnológicas en la España vaciada. Esto es, en plena oleada de protestas de los ganaderos, el Gobierno quiere que el mundo rural aprenda sobre internet.
Con la intención de que los agricultores adquieran «habilidades básicas de navegación, localización de datos, manejo de información y verificación de contenido digital», la subvención se otorgará a un grupo de entidades afines que enseñen las bondades de las nuevas tecnologías a aquellos que en la España rural no llegan a fin de mes. 21 millones que podrían ir a los agricultores, pero que Pedro Sánchez prefiere destinar a entidades seleccionadas.
Mientras los autónomos del mundo rural y los agricultores reclaman soluciones al Gobierno de España y a Bruselas para flexibilizar las obligaciones legales, simplificar la burocracia, y actualizar la normativa medioambiental y la PAC, el Gobierno, a través del Ministerio de Transformación Digital, ha priorizado estas subvenciones millonarias para digitalizar a los agricultores de la España rural.
Entre todos los requisitos de la convocatoria pública, los programas de formación deberán tener «una duración mínima de 7,5 horas de trabajo estimado de los participantes», incluyendo también sesiones de formación, mentorización y asesoramiento digital para desarrollar «los conocimientos y competencias del programa formativo». Otros requisitos incluyen la demografía específica (priorizando a ancianos y mujeres) y las poblaciones pequeñas (aquellas de población inferior a 5.000 habitantes).
