El hermano del presidente del Gobierno, David Sánchez, ha reconocido ante la jueza Beatriz Biedma que desconoce la ubicación física de la Oficina de Artes Escénicas de la Diputación de Badajoz, el organismo que encabeza desde hace años. Durante su declaración, matizó que no tiene conocimiento de si dicha oficina cuenta con un espacio concreto asignado.
Sánchez, quien inicialmente fue contratado en julio de 2017 como Coordinador de Actividades de los Conservatorios de Música de la Diputación, fue posteriormente designado jefe de la Oficina de Artes Escénicas, cargo que ostenta con un sueldo anual de 55.000 euros. Este nombramiento ha sido objeto de controversia, ya que ahora se encuentra investigado por posibles delitos de prevaricación, tráfico de influencias, malversación y otros contra la Administración Pública y la Hacienda Pública.
La declaración tuvo lugar este jueves en los Juzgados de Badajoz, donde Sánchez evitó la entrada principal accediendo por el garaje para esquivar a los medios y a los manifestantes congregados en el lugar. Según fuentes judiciales, esta entrada poco común fue justificada por motivos de seguridad, debido a las protestas y al elevado interés mediático que rodea el caso.
La comparecencia comenzó a las 9.00 de la mañana, extendiéndose durante algo más de hora y media. David Sánchez respondió únicamente a las preguntas de la jueza, la fiscal y su abogado, Emilio Cortés, acogiéndose a su derecho de no declarar ante las acusaciones populares. Esta actitud ha generado críticas en algunos sectores, que consideran insuficientes las explicaciones ofrecidas.
Fuera del Palacio de Justicia, varias organizaciones habían desplegado pancartas y vehículos con mensajes críticos hacia el presidente del Gobierno, entre ellos frases como «Sánchez acorralado» o «La tormenta judicial continúa«. La tensión en el exterior reflejaba el creciente interés público en torno a las investigaciones que afectan al hermano del líder del Ejecutivo.
El caso de David Sánchez, por su vinculación con la familia del presidente, ha puesto bajo el foco mediático la gestión en la Diputación de Badajoz y ha alimentado las sospechas de tráfico de influencias en la administración pública. La investigación sigue en curso, y las autoridades deberán esclarecer si hubo irregularidades en su nombramiento y desempeño.
