El general jefe de la Guardia Civil en Cataluña, Pedro Antonio Pizarro de Medina, ha organizado una conferencia sobre las víctimas del bando republicano durante la Guerra Civil llamada «¿Existe una memoria democrática de la Guardia Civil?» con motivo de la conmemoración de su Patrona, la Virgen del Pilar.
Lo sorprendente es que, más allá del tinte ideológico presente durante toda la ponencia —a la que acudieron diputados del PSOE en el Congreso de los Diputados como Juan Carlos Jerez—, el profesor elegido para hablar de ello ha sido Manel Risques, que se dice especializado en «la política de orden público, la violencia, la represión y las fuerzas policiales en los siglos XIX y XX».
Al inicio de su intervención, ha recordado unas palabras del general Mola que decían lo siguiente: «Si veo a mi padre en las filas contrarias, lo fusilo«. Según apunta, esta declaración llevó al bando nacional a dar un golpe de Estado con el objetivo de que el terror jugase un papel crucial e inclinase la balanza hacia ellos.
«La Guardia Civil fue una víctima más de Franco, hasta el punto de hasta agosto de 1939 se planteó muy seriamente disolverla y refundarla con la estructura de una policía política. Murieron mandos de un tiro por la espalda por parte de sus subordinados», ha añadido en relación al tema del que venía a hablar.
Sin embargo, en ningún momento ha hecho mención a crímenes o frases amenazantes que se vertieron desde el bando contrario, tratando de normalizar el discurso que el PSOE lleva tiempo buscando a través de la Ley de Memoria Democrática: crear una España de buenos y otra de malos.
¿Quién es Manel Risques?
Afín al separatismo catalán, se dio a conocer en 2016 por hacerse una foto junto a una estatua de Francisco Franco decapitado encima de un caballo. Además, estuvo entre los firmantes de un documento en 2019 contra VOX, llegando a tildar a la formación patriota de «manipuladores», «racistas», «intolerantes» y «xenófobos».
«Por todo ello, los abajo firmantes, científicos sociales de universidades y organismos de investigación, nos unimos para hacer constar que muchas de las afirmaciones y consignas de VOX (y especialmente las más recientes) no se fundamentan en estudios que hayan sido analizados siguiendo principios y procedimientos elementales de la investigación científico-social, dando así pie a interpretaciones y extrapolaciones falsas y exageradas, que en nada se asemejan a los problemas y realidades que nos rodean», concluía el documento firmado por un total de 3.020 personas.
