El proyecto de presupuestos de 1.218 millones de euros para Guipúzcoa en 2025, el más elevado jamás registrado en el territorio, será aprobado gracias al apoyo del Partido Popular. Este respaldo resulta clave para el gobierno foral, liderado en minoría por PNV y PSE-EE, que necesitaba garantizar al menos tres votos de la oposición para evitar un bloqueo.
El portavoz del PP en las Juntas Generales, Mikel Lezama, anunció la decisión en una rueda de prensa en San Sebastián, justificando el apoyo de su grupo como un acto de «honestidad y responsabilidad». Según Lezama, «la batalla partidista no puede ser un obstáculo para que Guipúzcoa avance», destacando que entre las propuestas aceptadas por el ejecutivo foral se encuentra un plan piloto destinado a combatir el envejecimiento de la población mediante la formación e inserción laboral de personas migrantes.
El escenario en las Juntas Generales, donde PNV y PSE suman 24 escaños frente a los 22 de EH Bildu, 3 del PP y 2 de Elkarrekin Podemos, obligó al gobierno de Guipúzcoa a buscar apoyos de la oposición tras haber tenido que prorrogar las cuentas de 2023 por falta de consenso. Durante meses, se llevaron a cabo reuniones con todos los grupos para evitar una situación similar este año. Finalmente, el acuerdo con el PP garantiza la aprobación de las cuentas en el pleno del próximo 20 de diciembre.
Sin embargo, el respaldo del PP ha generado críticas de otros grupos. EH Bildu ha anunciado una enmienda a la totalidad del proyecto y ha calificado el pacto con el PP como una «anomalía política», señalando que se trata de una formación «residual en Guipúzcoa«. Por su parte, Elkarrekin Podemos ha registrado cerca de un centenar de enmiendas que suman más de 38 millones de euros, enfocadas principalmente en incrementar recursos para el acceso a la vivienda de alquiler.
El juntero Lezama aprovechó para lanzar un mensaje sobre la importancia de abordar el fenómeno migratorio desde una perspectiva constructiva: «Tenemos la obligación de encarar el futuro despojando los fantasmas que alimentan un populismo que mezcla nacionalismo y supremacismo y que empieza a dar verdadero miedo.»
El gobierno foral, pese a contar ya con los votos necesarios para aprobar las cuentas, ha reiterado su disposición a dialogar con EH Bildu y Elkarrekin Podemos para incorporar posibles mejoras. La aprobación definitiva marcará un paso significativo en la política presupuestaria del territorio, garantizando recursos esenciales para los próximos años.
