El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, ya señaló que procurarán que no entre de ninguna forma, tampoco escondido en un maletero.
El separatismo ya duda sobre la llegada del prófugo Carles Puigdemont para la investidura. Desde ERC plantean abiertamente un plan B y parte de JxCat también aboga por esta solución, aunque el entorno del expresidente se mantiene firme y amenaza con nuevas elecciones.
Mientras, las hipótesis sobre la remota forma de regreso de Puigdemont se multiplican. El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, ya señaló que procurarán que no entre de ninguna forma, tampoco escondido en un maletero.
Entre tanto, según publica Libertad Digital, un ejercicio de un examen universitario del segundo curso del Grado Ingeniería en Tecnologías Industriales con Administración de Empresas, impartido en universidades catalanas como la de Gerona o la de Ramon Llull de Barcelona, ha propuesto a los estudiantes que digan una escapatoria para «sabotear el dispositivo» de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y que el presidente fugado Puigdemont pueda llegar a España.
El problema -escrito solo en catalán y en lenguaje informal- tilda a Puigdemont de «muy pícaro» y termina con una pregunta: ¿conseguirá el presidente Puigdemont atravesar la frontera y llegar al Parlament para ser investido?
El delirio del examen no se queda aquí, ya que el segundo problema afecta al exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, en prisión preventiva en la cárcel de Estremera. El profesor pide a los estudiantes que le ayuden a conseguir una radio casera para escuchar los partido del Barcelona.
El separatismo ya utilizó el examen de Selectividad de 2016 para seguir sentando doctrina e impulsar la visión imaginaria de la historia, y preguntó sobre el cuadro de Ramón Casas «La carga», pintado en 1899 y que actualmente está en el Museo Comarcal de la Garrocha de Olot. Esta es la pintura con la que el nacionalismo catalán suele ilustrar la supuesta represión que ejerció la Guardia Civil durante una huelga en Barcelona en 1902.
Además, incluyó una noticia de El Correo Catalán en 1939 en la que se informaba de las multas impuestas a varios comercios por rotular en catalán, una ley de la Generalitat de 1934 respecto los derechos de las mujeres en la región y el embarque de tropas de Marruecos al comienzo de la Guerra Civil.
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