«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
respalda el decreto ómnibus del gobierno

Feijoo acepta la cesión al PNV y la protección para los okupas con tal de no perder el voto pensionista

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo. Eduardo Parra

La estrategia del Partido Popular ha dado un vuelco en la votación del nuevo decreto ómnibus del Gobierno. Después de días de críticas contra el acuerdo alcanzado entre el Partido Socialista y Junts, la dirección de la formación ha decidido respaldar la propuesta de Pedro Sánchez, que incluye la revalorización de las pensiones y ayudas al transporte. El cambio de postura ha generado sorpresa dentro y fuera de la formación, sobre todo porque el paquete legislativo mantiene medidas que hasta ahora habían sido consideradas líneas rojas por los populares, como la cesión del palacete del Instituto Cervantes en París al PNV y la prórroga de la paralización de desahucios.

Hasta este miércoles, el PP había mantenido en secreto el sentido de su voto, mientras dentro del partido se debatía entre el ‘no’ y la abstención. Sectores más duros exigían mantenerse en la negativa por coherencia, mientras que otros veían la abstención como una opción más equilibrada, dado que se había desglosado parte del decreto, pero aún mantenía concesiones al PNV y medidas contra los desahucios. Sin embargo, Feijoo tenía otros planes y optó por dar un golpe de timón que ha generado malestar en ciertos sectores del partido.

El líder del PP tomó la decisión tras evaluar los riesgos de quedar marcado como el partido que se opone a la subida de las pensiones. Génova temía que el PSOE aprovechara la situación para desgastar a los populares entre el electorado de mayor edad, un grupo clave en las elecciones. Según datos del CIS tras las generales de 2023, el PSOE aventajó al PP en 12,6 puntos entre los votantes de entre 65 y 75 años.

«Si votamos en contra, la campaña entre los pensionistas será tremenda», admiten fuentes del PP madrileño. En la Comunidad Valenciana compartían el mismo temor, y varios barones populares coincidieron en que una abstención también podría haber sido utilizada en su contra. «Los pensionistas esperan de nosotros certidumbre. No podemos dar la sensación de que dudamos en algo tan sensible», subraya un presidente autonómico al diario El Confidencial.

El giro del PP ha dejado espacio libre a VOX para presentarse como el único partido de la oposición frontal al Gobierno. Su presidente, Santiago Abascal, no tardó en reaccionar y atacó con dureza a los populares por su cambio de postura. «Es desolador ver al PP votando con Sánchez para regalarle un palacete al PNV, para favorecer la okupación y para salvar a un Gobierno en dificultades», criticó el líder de VOX en sus redes sociales.

Además, la Plataforma de Afectados por la Ocupación, que había mantenido una línea de diálogo con el PP en su lucha contra la okupación ilegal, ha anunciado que boicoteará todos los actos organizados por el partido, incluyendo la presentación del plan de vivienda de Feijoo en Madrid. La organización ha considerado la decisión de apoyar el decreto como una traición a su compromiso contra la okupación y la protección de los propietarios.

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