El secretario general de VOX, Ignacio Garriga, ha denunciado hoy durante su intervención en el pleno del Parlamento de Cataluña la «negligencia, el fanatismo ideológico y la falta de autocrítica» del Govern tras el apagón sufrido el pasado lunes, que dejó sin suministro eléctrico a miles de catalanes, afectando gravemente a servicios esenciales, empresas y familias. Garriga ha señalado que tachaban a VOX de «alarmistas» cuando Illa y todo su gobierno «sabían que el apagón iba a ocurrir».
Durante su intervención, Garriga ha asegurado que «lo sucedido no ha sido una sorpresa», recordando que tanto VOX como numerosos organismos técnicos y profesionales ya habían advertido del riesgo de colapso del sistema eléctrico. «Lo sabían usted, su gobierno y el propio Pedro Sánchez, pero decidieron desoír las advertencias tachándolas de alarmismo de la extrema derecha», ha recriminado. El líder de VOX ha señalado como principal causa del apagón el «fallido e ideologizado modelo energético» impulsado por el Gobierno catalán, caracterizado por el cierre de centrales nucleares, la persecución fiscal a fuentes estables de energía y la negativa a desarrollar infraestructuras clave como las líneas MAT. Asimismo, ha criticado que «su política energética no es una transición, es una demolición».
Y es que «la principal conclusión es que el modelo energético de España y de Cataluña está enfermo y la enfermedad tiene un nombre: fanatismo climático. Impulsando esa ideologización del mix energético en lugar de garantizar la estabilidad de la energía en nuestro territorio. En lugar de escuchar a los ingenieros, ustedes deciden escuchar a los activistas y en lugar de garantizar el suministro, ustedes prefieren garantizar la propaganda. Es decir, que se ha constatado, señoría, que su transición ecológica lo que en realidad es, es una demolición de nuestro sistema energético y de red eléctrica».
Según el líder de VOX, «el problema puede ser técnico, pero tiene una raíz política». Para Garriga «la energía solar y eólica no tiene inercia, no estabiliza el sistema y son intermitentes. La red de energía necesita energía síncrona, energía estable, que responde a picos de demanda, a posibles fluctuaciones, y eso lo proporcionan las centrales nucleares y el ciclo combinado». Un hecho que «Illa no puede negar, pero están dispuestos a cerrar nucleares, a aprobar impuestos confiscatorios para cerrar más nucleares y despreciar cualquier solución técnica que no encaje en sus eslóganes verdes. Es decir, ustedes han entregado su política energética a fanáticos y activistas, y usted sabe que eso nos va a condenar a otro apagón de manera irremediable, porque ustedes no solo cierran nucleares, también renuncian a esas líneas de muy alta tensión».
Garriga ha criticado también la respuesta del Ejecutivo autonómico tras el incidente: «Han adoptado tres medidas que no abordan las causas, sino que solo buscan paliar las consecuencias futuras. Ni una sola palabra de autocrítica, ni un solo gesto de responsabilidad, ni una dimisión«, ha reprochado, calificando de «escándalo» la apertura de expedientes a Endesa y Red Eléctrica mientras «se exime al propio Govern de su responsabilidad».
Es por ello que, según Ignacio Garriga, «lo mínimo que merecen los catalanes es que ustedes pidan perdón por lo ocurrido. Hay ciudadanos que quedaron atrapados en ascensores, trenes o dependían de soporte vital. Pero ustedes siguen instalados en el relato ideológico del fanatismo climático». A pesar de las advertencias de VOX, Illa «ha ratificado que no va a hacer absolutamente nada, que va a persistir en el error y que auguro que no sé cuándo, pero los catalanes y el conjunto de España va a verse sumido en otro apagón por su nefasta gestión», ha declarado Garriga.
Por último, ha instado a Illa que «exija al Gobierno de su partido, al Gobierno de España, que paralice ese plan de acabar con las nucleares, que promueva acabar con el impuesto autonómico que imponen a las nucleares, que acabe con la ideologización de su proyecto energético que se ha demostrado fallido y el causante del apagón del pasado lunes, que invierta en modernizar la red eléctrica, en mejorar las interconexiones o en el almacenamiento energético y deje de subvencionar y de destinar el dinero de los catalanes a países extranjeros y ponga a Cataluña a trabajar para que el conjunto de España recupere esa tan ansiada y necesitada soberanía energética».
