El líder de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, se ha presentado en el juicio del «procés» como un «preso político» que ha entrado en prisión por ser «un activista social» y ha afirmado ser independentista con «un sentimiento republicano», hechos por los que ha dicho estar seguro de que no está siendo juzgado.
«Yo soy un preso político, no soy un político preso», ha señalado Cuixart, que se enfrenta a 17 años de cárcel por rebelión en el juicio que celebra el Tribunal Supremo.
Ha manifestado que él, como su «compañero» Jordi Sànchez, expresidente de la ANC, entraron en prisión el 16 de octubre de 2017 «por el hecho de ser activistas sociales y no políticos».
Por ello, ha justificado no saber «en profundidad de las leyes» y del ámbito parlamentario de Cataluña dado que nunca ha participado en la vida política.
Cuixart, el único acusado que no ha protestado ante el tribunal por no contar con traducción simultánea del catalán, ha comenzado su declaración explicando el origen y objetivos de la asociación que preside y que cuenta con un «99,9 por ciento de socios independentistas».
«Yo mismo soy independentista, tengo un sentimiento republicano y estoy seguro de que aquí no se está juzgando mi sentimiento republicano», ha precisado el líder de Òmnium, que solo va a contestar a la Fiscalía y a las defensas, pero no a la Abogacía del Estado o Vox.
«No lo dude, no se está juzgando eso», le ha respondido el fiscal Jaime Moreno.