Los grupos separatistas siguen repartiendo publicidad de la consulta ilegal, en ella incitan a delatar a los no separatistas
Los ciudadanos catalanes están recibiendo en su casa diferentes sobres con publicidad para la celebración del 1-O. Entre los folletos que están apareciendo en los buzones -los dejan voluntarios que visitan puerta tras la prohibición del mailing- destaca uno que lleva por título “Siete pasos para votar”.
En él se dan varias recomendaciones, escritas exclusivamente en catalán, que debe cumplir todo buen separatista. Bajo el lema de que “El 1 de octubre, cada voto cuenta”, llaman a los catalanes a promover la consulta ilegal entre sus círculos personales y profesionales.
Entre los puntos, destaca especialmente el que se encuentra en cuarto lugar que dice: “Haz una lista con todas las personas que crees que no irán a votar por alguno de estos motivos: tienen miedo, dudas, o no son independentistas”. Es decir, incitan a delatar a todos aquellos que no acudan a votar el 1-O, al más puro estilo totalitario.
A quienes están difundiendo esta propaganda, que aparece sin firmar, habría que preguntarles ¿qué se hace con esa lista?¿dónde se entrega?¿qué uso se pretende hacer de ella? Porque quienes estén decididos a no votar, que es la mayoría de la población catalana, se ven amenazados por esta llamada a delatar a los “disidentes”.
Las otras recomendaciones van en líneas similares: envíos de mensajes de whatsApp a los contactos informando de los lugares de votación, indicar a tus conocidos el lugar de votación que les corresponde, imprimir carteles como el que se reproduce en esta información y difundirlo entre tus vecinos, practicar con el ejemplo, vulnerar la jornada de reflexión animando a los conocidos a que acudan a votar al día siguiente y, el remate final, llaman a que la gente se haga fotos votando para difundirlas a través de las redes sociales.
Con todas estas recomendaciones pretenden que los catalanes acudan a votar en masa a una consulta, a la que ellos llaman referéndum, que desde el primer momento fue declarada ilegal por el Tribunal Constitucional.
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