La situación fiscal y laboral de David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, ha sido objeto de continuas modificaciones desde 2020, y este año enfrenta un nuevo reto que podría complicar aún más la postura de la Agencia Tributaria (AEAT). Recientemente, la esposa de Sánchez, Kaori Matsumoto, junto con su hija de dos años, K.M.S., se mudarán a Madrid, lo que pone en entredicho la justificación de la AEAT para considerar a Sánchez como residente fiscal en Portugal.
El informe de la Agencia Tributaria, enviado a la jueza que investiga a Sánchez en Badajoz, ha sido objeto de críticas por parte de inspectores y expertos en fiscalidad, quienes lo califican de «insólito» por su falta de firma y membrete. Este documento, que no cuestiona el incremento patrimonial no justificado de Sánchez ni su residencia fiscal en Portugal, se apoya en una interpretación del Convenio para Evitar la Doble Imposición (CDI) entre España y Portugal, concluyendo que Sánchez no tiene residencia fiscal en España, basándose en el artículo 4 del mismo.
A pesar de que Sánchez posee una vivienda y una plaza de garaje en Madrid desde 1992, la AEAT argumenta que no tiene una residencia permanente en España debido a que dicho inmueble está alquilado. Sin embargo, en 2023, Sánchez adquirió un palacete en Elvas, Portugal, y ha proporcionado a la AEAT facturas de hospedaje en un hotel de esa localidad y justificantes de transferencias bancarias correspondientes a pagos de alquiler, lo que refuerza su residencia fiscal en el país vecino.
La situación se complica con el reciente traslado de Kaori Matsumoto a Madrid tras ganar un puesto en la Oficina de Naciones Unidas contra el Terrorismo (UNOCT), con sede en la capital española. Este hecho, junto con la inminente residencia de su hija en Madrid, podría desbaratar el argumento de la AEAT de que Sánchez no tiene una vivienda permanente en España.
El traslado de Matsumoto a Madrid fue facilitado por gestiones del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. La ONU, agradecida por el «generoso apoyo financiero» del Gobierno español, otorgó a Matsumoto el puesto de Program Management Officer, P-3, tras un concurso convocado en noviembre de 2023. Este nuevo empleo y la residencia de su familia en Madrid podrían poner en tela de juicio la residencia fiscal de Sánchez en Portugal.
Finalmente, el 18 de julio de 2023, el Gobierno español aprobó una ayuda oficial de 454.873 euros para apoyar el programa de la UNOCT en Madrid, además de una contribución adicional de 50.000 euros, lo que facilitó el desarrollo de dicho programa y, en última instancia, la contratación de Matsumoto. La ONU solicitó un visado para Matsumoto y su hija en junio de 2023, lo que sugiere que ambas dispondrán de una residencia en España, posiblemente en régimen de alquiler.