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Ramiro de Maeztu
usan una naranja podrida para denunciar que los mercados agonizan
La Comunidad Valenciana, en pie de guerra contra una campaña del Gobierno de Sánchez que hunde a sus naranjas
La Comunidad Valenciana, en pie de guerra contra una campaña del Gobierno de Sánchez que hunde a sus naranjas
La Comunidad Valenciana, en pie de guerra contra una campaña del Gobierno de Sánchez que hunde a sus naranjas. Europa Press.
Por LGI
18 de abril de 2024

La consejera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, de la Comunidad Valenciana, Nuria Montes, pide eliminar una campaña que perjudica seriamente al sector de las naranjas valencianas. También expresa su «disconformidad» con el producto elegido para la imagen de la campaña, una naranja podrida, bajo el lema ‘Los mercados se mueren’.

A ella se une la directora general de Comercio, Artesanía y Consumo, Maribel Sáez. Ambas exigen al Gobierno y al Ministerio de Consumo y Agenda 2030 la «retirada inmediata» de la campaña ‘Los mercados se mueren’. Los carteles son de la ONGD Justicia Alimentaria, pero con apoyo económico del Ejecutivo.

Nuria Montes califica de «absolutamente inadmisible» que el Gobierno central permita esta campaña. La tacha de «de desprestigio y agresión injustificable hacia nuestros mercados y nuestros productos alimentarios más representativos», según ha apuntado la Generalitat en un comunicado.

La consejera añade que «lejos de proteger a los mercados, los perjudica gravemente». Y avisa de que pone «en peligro el puesto de trabajo del medio millón de personas» que trabajan en mercados municipales de toda España. En una carta enviada al Gobierno destacan que en la Comunidad Valenciana hay 149 mercados, con 4.244 paradas que generan un empleo directo de 10.600 personas. El 65% de ellas, por cierto, son mujeres.

En este sentido, explican que, para la Comunidad, las naranjas valencianas son «una seña de identidad, equiparable a muchos símbolos de suma importancia para los valencianos». La comparan con «el plátano para Canarias o el marisco para Galicia». Y critican que el tratamiento de esta imagen es «una manipulación que desprestigia a la naranja».

Por su parte, el síndic del PP en Las Cortes Valencianas, Miguel Barrachina, reclamaba la retirada de los carteles, al considerar que supone menospreciar un «icono» de su agricultura. Para Barrachina, esta iniciativa daña la imagen de la Comunidad Valenciana, al utilizar naranjas podridas cuando estas frutas son un valor de la economía regional.

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