«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

TSJC seguirá adelante con la nueva investigación por desobediencia contra Torra

El presidente de la Generalitat, Quim Torra

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha acordado seguir adelante con la nueva causa por desobediencia que abrió en febrero al presidente catalán, Quim Torra, por desoír su orden de que retirara del Palau de la Generalitat una pancarta de apoyo a los políticos presos.

En un auto, que es firme, la sala civil y penal del alto tribunal catalán desestima el recurso de súplica que la defensa de Torra presentó contra la nueva investigación por desobediencia al presidente catalán, que ya cuenta con una condena de año y medio de inhabilitación por negarse a retirar los lazos amarillos de edificios públicos en período electoral.

La nueva causa, abierta el pasado mes de febrero y que quedó en suspenso porque Torra recusó a los magistrados de la sala, deriva de la negativa del presidente catalán a cumplir con una orden de la sala contenciosa del TSJC que le emplazaba a descolgar del balcón del Palau de la Generalitat una pancarta de apoyo a los políticos presos, de forma permanente, no solo en período electoral.

Torra planteó la recusación de los tres miembros de la sala penal que acordaron abrir la investigación por desobediencia -el propio presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, y los jueces Mercedes Armas y Carlos Ramos-, pero el alto tribunal catalán la desestimó la semana pasada, con lo que causa se reactiva ahora.

En su recurso, la defensa de Torra alegaba, como ya hiciera en el juicio por desoír el requerimiento de la Junta Electoral de no retirar los lazos amarillos, que la orden del TSJC de descolgar la pancarta era ilegítima y contraria al derecho fundamental a la libertad de expresión.

No obstante, el TSJC considera que estimar el recurso de Torra impediría abrir un proceso penal para «dilucidar» si cometió en un delito de desobediencia a laresoluciones judiciales cuando decidió mantener la pancarta, que finalmente acabaron descolgando los Mossos d’Esquadra por orden del alto tribunal.

La orden dirigida a Torra la dictó el pasado mes de septiembre, como medida cautelar, la sala contenciosa del TSJC, a raíz de una demanda presentada por la asociación Impulso Ciudadano -liderada por el exdiputado de Cs en el Parlament José Domingo- que pedía que se descolgaran la pancarta y el lazo del balcón del Palau para mantener la neutralidad del edificio permanentemente, no solo en período electoral.

El presidente de la Generalitat desoyó el ultimátum de 48 horas que le dio el tribunal y recurrió en paralelo la orden, tras lo que el TSJC dictó un nuevo requerimiento en el que instaba a los Mossos d’Esquadra a retirar los símbolos de apoyo a los políticos presos del Palau «de forma inmediata».

Tras la retirada de la pancarta, cuatro activistas independentistas, los exdiputados Lluís Llach y Antonio Baños, la actriz Sílvia Bel y la portavoz de la plataforma Som Escola, Teresa Casals, desplegaron otra con el lema «Libertad de opinión y expresión. Artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos».

Torra cuenta ya con una condena de año y medio de inhabilitación impuesta por el TSJC -que el Supremo revisará el próximo 17 de septiembre- por desobedecer la orden de la Junta Electoral Central de retirar los lazos amarillos de los edificios públicos antes de las elecciones generales del 28A.

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