Arrestado entre miércoles en Madrid, Galán actuaba como un cibersoldado del Estado Islámico y realizaba labores de adoctrinamiento para la organización terrorista.
El detenido esta mañana en Madrid como presunto integrante de la organización terrorista ISIS es Luthfullah «Yusuf Galán» González, único español miembro de la célula de Al Qaeda juzgada y condenada en España por los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York.
Galán había sido condenado ya por su integración en la organización terrorista, y tras su puesta en libertad, se había acercado al Estado Islámico y había desarrollado «en los últimos años un perfil afín a la figura del cibersoldado, la versión 2.0 del combatiente yihadista que emplea la red informática para compartir, interactuar y propagar el ideario terrorista».
El islamista había difundido varios vídeos en los que él mismo aparecía manejando armas blancas con gran destreza, acompañados de mensajes en favor de las acciones del Estado Islámico en todo el mundo. Su papel de adoctrinador, unido a su condena por yihadismo, le granjearon una notable fama entre los fanáticos internautas.
Galán formó parte del grupo de yihadistas condenado en 2015 como parte de la célula de Al Qaeda en España. Fue el primer condenado en España por los atentados acaecidos en Nueva York y se encontraba a las órdenes de Imad Eddin Barakat Yarkas, Abu Dahdad, que sí conocía los objetivos del grupo terrorista.
‘No es ningún terrorista’
Luis José Galán González, nacido en Madrid en 1965, demostró tener una personalidad controvertida durante el juicio, impresión corroborada por las declaraciones de varios testigos en la vista.
«Un personaje histriónico y un poco payaso, fruto de una personalidad poco equilibrada», así definió al detenido el presidente de Paz Ahora, ONG con la que había colaborado recabando ayuda humanitaria para países en conflicto y en la organización de manifestaciones por la paz, e incluso contra los atentados del 11S.
Dos de sus hermanas confirmaron ante el tribunal su conversión al Islam durante un viaje a Turquía en los años noventa y su afición a disfrazarse.
Su abogada negó que Galán fuera un terrorista y dijo que sufría «un trastorno de personalidad», en el transcurso de un juicio en el que el ahora detenido se presentó como pacifista y subrayó que cuando tenía once años ya admiraba a Enrique Tierno Galván y por ello militó en el partido de éste, el Partido Socialista Popular.
Galán, que habla inglés y árabe, trabajó durante trece años como telefonista en el servicio internacional de atención al cliente de una empresa de paquetería, de la que fue despedido poco antes de su detención en 2001, presuntamente por enviar paquetes a amigos suyos en el extranjero.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, subrayó que en los últimos dos años ya son 207 los detenidos en España por yihadismo, de los que el 95 % están en prisión, un «altísimo porcentaje» que es posible por el trabajo de Policía y Guardia Civil contra «los que tienen la firme decisión de cometer actos terroristas». Y ha asegurado que este trabajo continuará.
«Ahora ha sido detenido porque se había vuelto a activar todo lo que era su mentalización yihadista y todo lo que estaba llevando a cabo para adoctrinar a personas para incorporarles al ISIS, hasta el punto de ser lo que los expertos han venido llamando un cibersoldado que usa redes sociales y todo lo que sean páginas web para adoctrinar y reclutar a gente», detalló.
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