Vivimos en un remolino informativo en el que es difícil orientarse desde el intento de asesinato de Donald Trump, que parece haber acelerado (o provocado, incluso) la renuncia de Joe Biden de competir contra el republicano por la Casa Blanca, una renuncia que sorprendió a su propio personal y para la que ni siquiera compareció físicamente.
Todas estas irregularidades sin precedentes, unidas al precipitado respaldo dado a la desastrosa vicepresidenta Kamala Harris, burlando la voluntad de los demócratas expresada en las primarias, ha desatado un mar de rumores en Washington.
Como, por ejemplo, dónde está Biden, por qué no aparece. ¿Sabemos siquiera si está vivo? ¿Está grave, terminalmente enfermo? Las palabras de su hermano menor Frank, que ha hecho declaraciones para distintos medios, han suscitado las especulaciones más alarmantes.
Preguntado sobre si creía que la salud y la vitalidad de su hermano jugaron un papel en su abandono, dijo a CBS: «En mi opinión, absolutamente». Y sigue: «Egoístamente lo traeré de vuelta para que disfrute el tiempo que le quede. Es un héroe genuino. El país está por encima de sí mismo. Suena cursi en nuestro cínico ambiente político, pero ni él ni yo somos cínicos».
Todo en torno al asunto resulta tan extraordinario que mucho hablan ya de «golpe palaciego». ¿Por qué la carta de renuncia de Biden no se escribió en papel con membrete de la Casa Blanca? ¿Y por qué hacer un anuncio tan transcendental un domingo y a través de una red social X?
Vale la pena repasar los eventos que se sucedieron en un solo día. Joe Biden de repente renuncia desde su cuenta en X, tan de repente, de hecho, que el personal de la Casa Blanca se entera un minuto después. La carta de «renuncia» de Joe Biden no tiene el membrete oficial de la Casa Blanca y Jill Biden responde al tuit con un emoji (un corazón). La Casa Blanca borra la agenda de Biden. Frank Biden corrobora que se trata de un problema de salud, y se expresa de tal forma que sugiere una enfermedad terminal. Joe Biden no comparece en vivo. Nadie puede decir seguro dónde está Biden, cómo está e incluso si está.
