El expresidente y candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, ha prometido desde Aurora, en el estado de Colorado, «acabar con el crimen de los inmigrantes», y ha pedido la pena de muerte para «cualquier inmigrante que mate a un ciudadano estadounidense o a un agente de la ley».
«El 5 de noviembre voy a rescatar a todas las ciudades que han sido invadidas y conquistadas», ha asegurado en el escenario, flanqueado por las fotos de inmigrantes indocumentados acusados de distintos delitos.
Desde Aurora, Trump ha vuelto a poner la inmigración en el centro de la campaña y ha aseverado que encarcelará o echará del país a «estos criminales viciosos y sedientos de sangre«. «Y seremos muy, muy eficaces al hacerlo. Va a suceder muy, muy rápido», ha agregado.
El candidato ha anunciado además que, de ser el vencedor en las presidenciales, pondrá en marcha la «Operación Aurora», una iniciativa para detener y deportar a los miembros de bandas de inmigrantes ilegales, y ha cargado contra su rival, Kamala Harris: «Ha importado un ejército de pandilleros extranjeros ilegales de las mazmorras del tercer mundo. Y ella los ha reasentado en su comunidad para aprovecharse de ciudadanos estadounidenses inocentes. En ningún lugar es más evidente que aquí mismo».
Asimismo, se ha comprometido a comenzar su promesa de deportaciones masivas en Springfield y Aurora. «Vamos a tener la mayor deportación en la historia de nuestro país. Vamos a coger a esa gente violenta y vamos a enviarlos de vuelta a su país», ha concluido.
