El Partido Popular y el Partido Socialista han apoyado un considerable incremento presupuestario para una serie de programas y agencias dedicadas a expandir la ideología de género y otros postulados de la agenda globalista, en la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo.
Entre los programas que han recibido un aumento de fondos se encuentran los destinados a la promoción de la igualdad, los derechos humanos y la integración de la perspectiva de género. Este tipo de políticas, que se han escondido tras un discurso de «igualdad», en realidad perpetúan divisiones sociales y fuerzan una reingeniería cultural contraria a las tradiciones y valores de las naciones europeas.
Una de las decisiones más importantes ha sido el aumento del presupuesto para la Agencia de Derechos Fundamentales. Esta agencia, lejos de proteger los derechos básicos de los europeos, se ha dedicado en los últimos tiempos a fiscalizar y obstaculizar el trabajo de los agentes fronterizos que luchan contra la inmigración ilegal. Su intervención se ha convertido en un obstáculo para aquellos que intentan asegurar nuestras fronteras, especialmente en lugares críticos como Canarias, donde la presión migratoria es insostenible.
VOX ha sido el único partido español que se ha opuesto a estos aumentos de gasto. La formación liderada por Santiago Abascal ha votado en contra de este aumento presupuestario, subrayando su compromiso con la defensa de la soberanía nacional y el sentido común en la gestión de los fondos públicos. VOX se ha opuesto especialmente al incremento de fondos para iniciativas como los verificadores de información —los conocidos como fact-checkers—, que han demostrado ser un instrumento para coartar la libertad de expresión, y el Observatorio de Narrativas, otro oganismo destinado a censurar cualquier disidencia frente al discurso oficial de la Unión.
Por otro lado, VOX ha apoyado el refuerzo de FRONTEX, la agencia europea encargada de la protección de fronteras, reconociendo su papel fundamental en la defensa de nuestras costas y, por tanto, de la seguridad nacional. La importancia de FRONTEX en regiones como Canarias es alta, y su fortalecimiento ha sido clave para contener la llegada masiva de inmigrantes ilegales que no ha cesado de aumentar, en gran parte debido a la permisividad de las políticas migratorias impulsadas desde Bruselas.
El incremento del presupuesto de la Fiscalía Europea ha sido otra cuestión polémica. Desde su creación, esta fiscalía ha actuado como un nuevo instrumento político de la Unión, solapándose con las fiscalías nacionales y extendiendo su sombra sobre los asuntos internos de los Estados miembros. VOX ha sido claro en su rechazo a esta maniobra de centralización del poder, que únicamente ha servido para despojar a las naciones de su capacidad de decisión soberana en cuestiones de justicia.
