La Justicia de Bolivia ha condenado este martes a seis años y tres meses de cárcel al expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada por la firma ilícita de contratos con compañías petroleras durante su segundo y corto mandato al frente del país, que tuvo lugar entre los años 2002 y 2003.
Así lo ha anunciado la Fiscalía del país, que ha indicado en un comunicado que la condena se produce tras casi dos décadas de proceso judicial en su contra en el marco de un caso conocido como ‘Petrocontratos’.
«Después de haber transcurrido casi 20 años de la presentación de la denuncia (…), el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), conformado en su Sala Plena, emitió sentencia condenatoria, imponiéndose la pena privativa de libertad», ha indicado la Fiscalía, que ha matizado que la Justicia ha dispuesto que el expresidente debe cumplir su condena en el centro penitenciario San Pedro de Chonchocoro, en la ciudad de La Paz.
No obstante, Sánchez se encuentra fuera de Bolivia, en Estados Unidos, donde fue condenado en 2018 junto al exministro de Defensa Carlos Sánchez Berzaín por su implicación en la muerte de decenas de civiles durante las protestas que tuvieron lugar en octubre de 2003 antes de que finalizara su mandato, por lo que ordenó a ambos compensar a las víctimas y sus familiares con 10 millones de dólares (9,5 millones de euros).
El expresidente, conocido por el sobrenombre de ‘Goni’, tiene también la nacionalidad estadounidense y actualmente sigue en el país norteamericano, hasta el que se trasladó en 2003 tras la llamada guerra del gas, un conflicto social en torno a la explotación del yacimiento de Tarija y que se remontaba a la década de los 90.