Grupos afines al expresidente de Bolivia Evo Morales han anunciado este miércoles una pausa de 72 horas de los bloqueos que desde hace 24 días vienen obstaculizando varias vías de acceso, principalmente las que conectan Cochabamba con el este y sur del país, en un momento en el que algunas estimaciones elevan las pérdidas a más de 11.700 millones de bolivianos (1.500 millones de euros).
La pausa se produce pese a que «ninguna organización» quiere, han dicho los dirigentes del llamado Estado Mayor del Pueblo, que habría accedido a las demandas de un Morales, que en los últimos días ha propuesto al Gobierno a negociar, a medidas que las fuerzas de seguridad van desbaratando algunos de estos bloqueos.
«Con todo ese dolor nosotros vamos a hacer una pausa, con vigilia, vamos a levantar momentáneamente estos bloqueos. Por humanidad vamos a lanzar esta pausa en el bloqueo nacional de caminos», ha anunciado Humberto Claros, dirigente sindical.
En la víspera, Morales se dirigió a sus acólitos para solicitarles, tal y como hizo el pasado viernes, que aceptaran una tregua momentánea de los bloqueos, a fin de poder establecer una mesa de diálogo con el Gobierno del presidente Luis Arce, al cual han vuelto a calificar en esta ocasión de «fascista y dictatorial».
Las demandas de Morales, que se encuentra en su quinto día de huelga de hambre, vienen en un momento en el que las fuerzas de seguridad bolivianas han logrado deshacer los bloqueos que durante varias semanas han dejado sin suministros de combustible y alimentos frescos varias regiones del país.