El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha vuelto a calificar este viernes a su homóloga peruana, Dina Boluarte, de «espuria» y reiteró su solicitud de liberación del expresidente izquierdista Pedro Castillo.
López Obrador se ha referido de nuevo a la crisis en Perú en su comparecencia de este viernes ante los medios, a los que ha informado del encuentro que mantuvo el día anterior con la esposa de Castillo, Lilia Paredes, a quien México, junto a sus hijos, concedió asilo político tras el arresto del expresidente peruano.
«Ella es una mujer excepcional, humilde, buena, que vino a agradecerme por lo que se hizo con ellos, a hablarme de sus hijos, que están estudiando. Estamos procurando que no les falte de nada, ayudarles», ha contado López Obrador, quien ha revelado que Paredes les ha pedido que no se olviden de su esposo.
«Consideramos que fue una gran injusticia el haberlo destituido de su cargo porque él fue electo por el pueblo, además violaron la Constitución», ha dicho López Obrador, que no ha tenido palabras tan amables para la actual mandataria peruana, a cuyo Gobierno ha acusado de reprimir las protestas con «las bayonetas».
«Aún así ellos mandan con las bayonetas y con la represión, con la fuerza. Ya van más de 60 asesinados (…) La mayoría de la gente de Perú está pidiendo que se convoque elecciones, que sea el pueblo que decida», ha dicho.
