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ENFILA CONTRA EL PRESIDENTE DE LA INSTITUCIÓN

Lula da Silva ataca la autonomía del Banco Central y busca controlar las tasas de interés

El presidente de Brasil, Lula da Silva. Europa Press

El presidente de Brasil, Lula da Silva, criticó duramente la actuación del presidente del Banco Central de Brasil, Roberto Campos Neto (designado durante la administración de Jair Bolsonaro y quien estará en el puesto hasta 2024). El actual jefe de Estado brasileño está en contra de la independencia del Banco Central y quiere interferir en las decisiones de las tasas de interés básicas en Brasil.

Lula dijo: «Basta ver la carta del Copom (Comité que define las políticas monetarias en Brasil) para que sepamos que este aumento de las tasas de interés y la explicación que le dieron a la sociedad brasileña es una vergüenza” cuestionando la actual política de tasas de interés del banco. El representante brasileño también había afirmado que la independencia del Banco Central es una “tonteria”. Además, señaló que Campos Neto quiere una inflación “estándar europeo”, pero que es necesaria una inflación “estándar brasileño».

Durante el mandato de Jair Bolsonaro se creó una ley que garantiza la independencia del Banco Central, y esto permitió que Brasil tuviera una inflación más baja que Estados Unidos, Inglaterra y Alemania el año pasado. Sin embargo, existe el temor de que Lula use su capital político o su fuerza junto con el poder judicial para derogar esta ley, como ya lo hecho antes en otros casos. Por ejemplo, cuando nombró al político Aloisio Mercadante para el banco estatal BNDES.

El presidente Lula también afirmó que este aumento de las tasas de interés y la explicación que le dieron a la sociedad brasileña es una «vergüenza».

El ex presidente del Banco Central en los primeros años del gobierno de Lula, Henrique Meirelles, defendió a Roberto Campos Neto. Meirelles comentó en entrevista con la Red Bandeirantes: “La inflación en Brasil se debe a la demanda, es evidente que no existe la demanda con la que sueña el presidente, donde las condiciones de vida fueran diferentes, que la población tuviera un mejor nivel de vida. La fórmula para lograr esto no es solo bajar la tasa de interés, necesitamos aumentar la productividad de la economía haciendo reformas fundamentales, capacitando a los trabajadores y creando más empleos. Esto logrará lo que él [Lula] sueña”. E incluso concluyó que la presidencia del Banco Central con Robertos Campos está “en buenas manos”.

La declaración de Lula sobre el Banco Central hizo subir el dólar a 5,20 reales.

Políticos de la oposición brasileña reaccionan a las críticas de Lula a la autonomía del Banco Central.

La diputada federal Carol de Toni (PL-SC) criticó la política económica del PT y su injerencia: «Lula y el PT quieren culpar al presidente del BC del desastre económico que ellos mismos están generando, para luego derrocarlo y poner un PT en el lugar». Carol de Toni también recordó que en 2022 Brasil creció más que China y ahora todo empeora con Lula.

El exdiputado Paulo Martins (PL-PR) analizó los objetivos del PT: “Lo repito: el objetivo inmediato del PT es sacar a Campos Neto del BC para poner en su lugar a un petista. Luego autorizar al BC a comprar títulos de deuda. Esto amplía las posibilidades presupuestarias y lanza la inflación a las estrellas”.

El senador Rogério Marinho (PL-RN) y líder de la oposición en el Senado criticó duramente a Lula: “En lugar de gobernar, Lula sigue diciendo luleces: sabotea la economía atacando la autonomía del Banco Central, la modernización de los marcos regulatorios y, ahora, la capitalización de Eletrobras”.

La autonomía de los bancos centrales es una medida adoptada en las economías más desarrolladas y prósperas del planeta. Pretende evitar el uso político para crear tasas de interés artificiales que terminen generando inflación y falta de atractivo para las inversiones en el largo plazo. Países como Argentina y Venezuela también son críticos de la autonomía del Banco Central y así como Lula defienden la injerencia política en ese aspecto.

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