El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, ha abogado por reforzar el «escudo nuclear» del país, una cuestión que considera «indispensable» para hacer frente a la amenaza de los países «más hostiles», durante una inspección a una fábrica de productos militares destinados a armamento nuclear. Tras haber sido informado sobre el funcionamiento de las instalaciones del Instituto de Armas Nucleares, Kim ha aprovechado para supervisar el proceso de fabricación.
«La situación de inseguridad que vive el país requiere de garantías sobre su soberanía, sus intereses y su desarrollo», ha aseverado Kim antes de lamentar que se trata de una situación «grave» debido al «desafío» que suponen algunos países de la comunidad internacional. «Este escudo nuclear permite contener a los enemigos de Corea del Norte», ha dicho.
Asimismo, ha manifestado que las «fuerzas técnicas nucleares» norcoreanas «se están volviendo cada día más fuertes», al tiempo que ha afirmado que «garantizar la paz y la seguridad es una forma de salir adelante». Finalmente, las últimas palabras de Kim apuntan a que no se producirá un cambio inmediato respecto a su política exterior a pesar de la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, que ha expresado ya su intención de lograr un acercamiento con Kim para reducir la tensión entre las partes.
