Tras una resolución propuesta por Estados Unidos y Ecuador, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó el lunes en una votación desplegar una fuerza multinacional en territorio haitiano.
La decisión, tomada con 13 votos afirmativos y sólo dos abstenciones en el pleno del Consejo, busca remediar la ola de violencia protagonizada por pandillas criminales dentro de la nación americana.
La medida contempla el envío a Haití de al menos 1.000 agentes de seguridad procedentes de Kenia. Jamaica, Barbados y Bahamas, entre otros países del Caribe, también han mostrado abierta disposición a enviar funcionarios para ayudar en dicha tarea.
Los países que se mostraron reacios a apoyar esta iniciativa fueron Rusia y China, quienes se abstuvieron en la votación. A la par de ello, ningún país de Hispanoamérica se ha mostrado francamente abierto a aportar agentes para llevar adelante la misión.
El Gobierno de Estados Unidos destinará dos partidas presupuestarias de al menos 100 millones de dólares cada una para poder ejecutar la medida desde el punto de vista logístico. El despliegue prevé además limitar la venta de armas en Haití y establecer una estricta vigilancia al respeto de los derechos humanos dentro del país.
