La visita del canciller ruso es la primera desde que en 2011 Kim Jong-un accediera al poder tras la muerte de su padre, Kim Jong-il.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, aterrizó hoy en Pyongyang, donde se reunirá con su homólogo norcoreano, Ri Yong-ho, para tratar lazos bilaterales y la situación en Corea en plenos preparativos para la cumbre entre EE.UU. y Corea del Norte.
Lavrov aterrizó en el aeropuerto internacional de Pyongyang Sunan, según informó la representación de la agencia japonesa de noticias Kyodo en suelo norcoreano, en lo que supone la primera visita de un titular de Exteriores ruso a Corea del Norte en nueve años.
El canciller ruso abordará con Ri asuntos de agenda bilateral, la situación en la península coreana y «otros temas clave del panorama internacional y regional», según explicó en la víspera el Kremlin.
La visita de Lavrov llega en un momento de frenética actividad diplomática entre Estados Unidos y Corea del Norte para tratar de lograr que la cumbre entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, se celebre como estaba originalmente previsto el 12 de junio en Singapur.
Ri ya se reunió con el canciller ruso en una visita a Moscú en marzo en la que Lavrov sugirió la posibilidad de que en el futuro Kim y el presidente ruso, Vladímir Putin, celebren una cumbre.
La visita del canciller ruso es la primera desde que en 2011 Kim Jong-un accediera al poder tras la muerte de su padre, Kim Jong-il.
Después de Pekín, Moscú es considerado el aliado más cercano de Pyongyang merced al legado soviético en el país asiático desde los tiempos de su fundación como estado comunista bajo la tutela de Stalin en 1945.
