El equipo del nuevo primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, juró hoy en el cargo tan solo dos días después de las elecciones generales anticipadas, que dieron la mayoría absoluta a la conservadora Nueva Democracia (ND).
Al igual que el nuevo jefe de Gobierno, quien asumió ayer el cargo, todos los miembros de su gabinete optaron por el juramento religioso, a diferencia del equipo del izquierdista Alexis Tsipras.
Rodeados de sus familias, en presencia de Mitsotakis, del presidente del país, Prokopis Pavlópulos, los miembros del equipo ministerial juraron lealtad a las leyes y la Constitución con la mano sobre la Biblia y en una breve ceremonia religiosa oficiada por el arzobispo de Atenas, Jerónimo II.
Esta tarde los ministros y ministras se dirigirán a sus respectivos departamentos, donde tendrá lugar el relevo de carteras, y para mañana está previsto el primer Consejo de Ministros, donde se espera que Mitsotakis avance algunos de sus proyectos mas inmediatos.
A pesar de que el líder conservador había anunciado que tendría un equipo más reducido que Tsipras, finalmente es un miembro menos: 51 personas, de las cuales 17 lideran una cartera ministerial y el resto son viceministros o ministros adjuntos.
Mitsotakis se ha rodeado de políticos con experiencia ministerial -seis de los ministros ya lo fueron en Gobiernos anteriores- pero también de personas de confianza que han estado a su lado en el trabajo de partido o que provienen del sector privado o público. Veintiún miembros del Ejecutivo no tienen escaño.
Como viceprimer ministro, el líder de ND nombró a Panayiotis Pikrammenos, catedrático de Derecho y juez con una breve experiencia al frente del Gobierno, entre mayo y junio de 2012. Fue el encargado de llevar el país a nuevas elecciones tras el fracaso de ND de formar una coalición.
Una de las carteras más importantes seguirá siendo, por supuesto, la de Finanzas, encabezada por Jristos Staikuras, quien ya ejerció como viceministro de este departamento en el Gobierno de Andonis Samarás, cuando Grecia firmó el segundo rescate.
El lunes, el Eurogrupo ya lanzó a Grecia el mensaje de que tiene que seguir cumpliendo los objetivos fiscales, que Mitsotakis ha prometido renegociar. «Esperamos ser capaces de trabajar con la misma relación de calidad que tuvimos con el anterior Ejecutivo», comentó el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici.
La persona encargada de sentar las bases para que mejore la situación en el mercado laboral y de llevar a la práctica la promesa de Mitsotakis de reducir a 500.000 (casi a la mitad) el número de desempleados será Yannis Vrutsis como ministro de Trabajo, una cartera que ya ocupó con Samarás.
«Tenemos un programa y un plan. Hemos demostrado que sabemos hacer las cosas», dijo al llegar al palacio presidencial.
Al frente de Exteriores está desde hoy Nikos Dendias, exministro de Protección Ciudadana con Samarás.
Con su nombramiento como jefe de la diplomacia helena, Mitsotakis parece querer lanzar un mensaje tranquilizador a sus socios en Occidente. Dendias ha sido uno de los pocos políticos griegos que no criticó el acuerdo, tan aclamado en el mundo, sobre el nombre de Macedonia del Norte firmado por Tsipras y su colega, Zoran Zaev.
