La principal plataforma online de emisión en directo, Twitch, se convierte en OnlyFans tras la última actualización en sus términos y condiciones. Tras no pocas reuniones, la empresa ha decidido un cambio en su política de contenidos que convertirá la web que ven todos los adolescentes de España en un parque temático de la pornografía.
Así, la empresa de emisiones, propiedad de Amazon, ha publicado un comunicado en el que pretende aclarar esta novedad: «Nuestros streamers nos comentan constantemente que nuestras políticas actuales sobre contenido sexual son confusas y a veces les resulta difícil saber si su contenido se interpretará con arreglo a estas políticas. Queremos que los streamers sientan la seguridad de que conocen nuestras reglas y que los espectadores tengan la tranquilidad de que obtendrán la experiencia que esperan».
Así, en favor de la seguridad de los streamers, la nueva decisión de esta multinacional perjudicará la seguridad de los jóvenes españoles. Junto a las retrasmisiones de fútbol —como las de Piqué— o de entretenimiento —como, por ejemplo, las del famoso Ibai—, los usuarios de Twitch encontrarán pornografía, catalogada con la etiqueta de «contenido para adultos», como si las adicciones dependiesen de la edad.
El comunicado de la empresa explica que de ahora en adelante las retransmisiones podrán contar con «contenido que resalte deliberadamente los pechos, las nalgas o la zona pélvica, aunque estén totalmente cubiertos con ropa». Y todo ello en aras de la supuesta igualdad: para la plataforma de Amazon, las mujeres quedaban penalizadas con los anteriores estándares: «La anterior política de contenido sexualmente sugerente no estaba en consonancia con los estándares de la industria y, como resultado, los streamers de aspecto femenino eran penalizados de forma desproporcionada».
Para mayor abundancia pornográfica, según el mismo escrito la nueva política permitirá la difusión de «senos de aspecto femenino ficticios al descubierto (dibujados, animados o esculpidos) o genitales y glúteos completamente al descubierto, independientemente del género». Esto es, pornografía. Y también se verán en Twitch «bailes eróticos que impliquen desvestirse o gestos de desvestirse, como el striptease».
Según las últimas estadísticas de la empresa, en 2022 Twitch registró una audiencia de 2,6 millones de espectadores simultáneos de media. En el momento de escribir este artículo, hay más de 3,1 millones de personas conectadas a los más de 108.154 canales emitiendo en directo, según el tracker diario de la plataforma. La nueva política de la empresa, por tanto, afectará a miles de «creadores» y millones de usuarios, que desde hace unos días ven en sus pantallas contenido pornográfico.
