Un grupo de científicos ha planteado la posibilidad de que las vacunas del covid puedan estar parcialmente relacionadas con el aumento de muertes inesperadas registrado desde el inicio de la pandemia. En concreto, ha sido un equipo de investigadores en los Países Bajos el que ha analizado datos de 47 países occidentales y ha revelado que, desde 2020, se han producido más de tres millones de muertes por encima de lo esperado.
El estudio, publicado en BMJ Public Health (revista internacional de salud pública) por autores de la Vrije Universiteit de Ámsterdam, destacó que estas cifras «sin precedentes» plantean «graves preocupaciones». Los investigadores han instado a los gobiernos a llevar a cabo investigaciones detalladas sobre las causas subyacentes, considerando la posibilidad de que las vacunas también puedan haber contribuido a estos resultados. En el artículo, se menciona: «A pesar de que las vacunas se introdujeron para proteger a la población de la enfermedad y de la muerte causada por el virus, también se han reportado efectos adversos».
Los autores señalaron que tanto los profesionales de la salud como los ciudadanos han notificado lesiones graves y fallecimientos relacionados con la vacunación en diferentes bases de datos oficiales en el mundo occidental. «Durante la pandemia, políticos y medios de comunicación subrayaron constantemente la importancia de salvar vidas con medidas de contención y vacunas. Tras la pandemia, ese principio debería mantenerse», añadieron los investigadores.
El análisis muestra que, en regiones como Europa, Estados Unidos y Australia, en 2020, año en el que la pandemia estaba en su apogeo, se registró un exceso de un millón de muertes. Sin embargo, en los años posteriores, a pesar de la introducción de las vacunas, el exceso de muertes aumentó, con 1,2 millones en 2021 y 800.000 en 2022. Este conteo incluye no sólo las muertes provocadas por el virus, sino también «efectos indirectos» derivados de las estrategias sanitarias aplicadas para controlar su propagación.
Los investigadores advirtieron sobre los posibles efectos adversos asociados a las vacunas, entre los que se encuentran el accidente cerebrovascular isquémico, el síndrome coronario agudo, hemorragias cerebrales, y una variedad de trastornos cardiovasculares, problemas de coagulación y eventos gastrointestinales.
