Que la izquierda ha sabido articular un relato político, histórico y social no admite discusión. Se ha dotado de la mayoría de medios de comunicación así como de un ejército de profesionales dispuestos a decir lo que sea. Es la famosa batalla cultural ante la que la derecha española, tradicionalmente pacata y temerosa de verse acusada de fascista, no ha sabido articular una respuesta coherente hasta ahora.
Pero todo apunta a que los vientos de la historia empiezan a hinchar las velas de un navío que temíamos anclado en la playa de la nada. No son pocos los nuevos medios que, aprovechando de las redes sociales, han empezado a inquietar a los mandarines socio comunistas. Ahí tienen a EDATV, el medio más censurado en nuestra democracia, las emisoras Informa Radio o Radio Decisión o a 7nn. Los zurdos las motejan despectivamente como “extrema derecha” cuando, en realidad, en países como EEUU serían emisoras que defienden a su patria y a los valores democráticos y constitucionales. Pero como esto es España y aquí se considera fachoso todo lo que no sea lo oficial, esas iniciativas adquieren el carácter de maudits lo que, parafraseando a Félix de Azúa en su “Historia de un idiota contada por él mismo” convierte ese grupo de medios en unos de perfectos caballeros.
¡Claro que no pueden aspirar a tener a Girauta, porque solo hay uno y no es hombre de enjuagues ni componendas!
Ejemplos: programa “Entre paréntesis” que mi hermano Juan Carlos Girauta conduce en Informa Radio las madrugadas de domingo al lunes. Una pequeña joya de orfebre hecha por alguien culto, sensible, inteligente y honesto; las tardes en Decisión Radio que lleva a cabo mi admirado Albert Castillón, un periodista como la copa de un pino, humano y tenaz buscador de la verdad pese a quien pese; Toni Cantó y su programa de los sábados por la noche en 7nn, fresco, ameno, con un ritmo del que ya no se ve en las teles. Los citados —que no se enfade nadie, porque hay muchísimos más— son envidiados por los directivos de plexiglás, envarados y llenos de aire, de los medios oficialistas. Pero ellos jamás podrían hacer tales formatos en sus cadenas. Carecen de libertad, de ideas, de profesionales con talento para llevarlas a cabo, de ese contra relato fresco e imprescindible como abonado para la verdad. Ellos se contentan con tener su huerto perfectamente delimitado por la plutocracia partidista abonado com el dinero que saben ha de caerles con puntualidad suiza. ¡Claro que no pueden aspirar a tener a Girauta, porque solo hay uno y no es hombre de enjuagues ni componendas! Tengo para mí que, además, los programas libres y cultos no los comprenden. Una vez, cierto ejecutivo de Antena Tres me dijo que un gag que yo había escrito no se entendía y que debíamos trabajar para la señora de Salamanca que veía la tele. Le respondí “Mira, gañán —textual— la señora de Salamanca es extremadamente inteligente. El que no entiende el gag eres tú, que no eres más que un borrico integral”. Me echaron. Aunque debo precisar que me han echado de tantos lugares que ya no vendrá de uno más.
