El arzobispo de la Diócesis de Madrid, monseñor José Cobo, ha visitado esta mañana la prisión de Soto del Real. Para celebrar la festividad litúrgica de Nuestra Señora de la Merced, el arzobispo se ha trasladado hasta el centro penitenciario, siguiendo una de las más arraigadas tradiciones de su predecesor, el Cardenal Carlos Osoro.
La visita para celebrar a la patrona de las instituciones penitenciarias, ha comenzado a las 10:30 de la mañana. El arzobispo ha estado acompañado por el vicario episcopal de Pastoral Social e Innovación, José Luis Segovia, y por la delegada episcopal de Pastoral Penitenciaria, María Yela. Además, con ellos ha recorrido el centro penitenciario el padre Paulino Alonso, capellán de la prisión.
Precisamente el viernes 22 de septiembre recibía el padre Alonso la medalla de oro de instituciones penitenciarias de manos del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Un galardón que premia la labor de 30 años de atención a los presos, primero como capellán de la cárcel de Carabanchel y los últimos 25 años en Soto del Real.
El arzobispo ha recorrido a lo largo de la mañana la enfermería, y a las 11:30 horas ha celebrado una Eucaristía con los presos en el salón de actos de la cárcel. Por último, la visita de monseñor Cobo ha terminado con la entrega de placas y medallas a los funcionarios de la prisión.
Una semana con la agenda apretada para don José, que este sábado 30 de septiembre será creado cardenal de la Iglesia por el Papa Francisco. Junto a otros 20 compañeros, el Santo Padre entregará a los nuevos cardenales el capelo cardenalicio en la Basílica de San Pedro. El domingo 1 de octubre, para celebrar el nuevo nombramiento, el neocardenal José Cobo presidirá una Misa —y una posterior comida— en el Colegio Español de Roma.
