El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha señalado que los hogares están experimentando un aumento encubierto en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) por parte del Gobierno. Una de las decisiones clave que ha contribuido a este incremento es la falta de ajuste de las tarifas a la inflación. De esta manera, los trabajadores y la clase media tienen que pagar más en concepto de renta, sin haber visto un aumento en su poder adquisitivo.
«A lo largo de 2022 y 2023, el aumento de los salarios en respuesta a la elevada inflación dio lugar a la denominada progresividad en frío en el IRPF, por la que los hogares se enfrentaron a tipos impositivos efectivos medios más elevados«, expone la institución que dirige Kristalina Georgieva en un reciente informe sobre la economía española.
De esta manera, el FMI se une a otras organizaciones como el Banco de España o la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal. Todos ellos han señalado que la reiterada negativa del Gobierno y del Ministerio de Hacienda de María Jesús Montero ha desembocado en un mayor pago de impuestos. Al no adaptar el impuesto a la inflación, el pago en IRPF es mayor porque los trabajadores declaran unos mayores ingresos y el resultado es que ceden poder de compra y pagan más por el IRPF.
A pesar de todo, el Gobierno ha mantenido su rechazo frontal a deflactar la tarifa. En el Ministerio de Hacienda exponen que eso beneficiaría a todas las rentas y, por lo tanto, también a las más altas, que son las que quieren que abonen una mayor cantidad de impuestos. Además, el departamento de Montero sostiene que los ingresos adicionales obtenidos son necesarios para financiar otras actuaciones.