La supuesta subida de las pensiones, vendida a la opinión pública por el Gobierno de Pedro Sánchez como uno de sus grandes logros, no se ha producido en 2023 según el discurso del líder del PSOE y sus ministros. Según la Seguridad Social, observando las nóminas brutas de las pensiones en 2023 los jubilados españoles pagaron de media un 14,3% más IRPF.
Y es que muchas pensiones, al subir el 8,5% previsto por el Ejecutivo, también han subido un peldaño en la escala de cotizaciones, por lo que su subida real no se acerca ni remotamente a la subida de los precios, haciendo que en general hayan perdido poder adquisitivo. Si el Gobierno hubiera puesto en práctica la deflactación con sueldos y pensiones que viene exigiendo la oposición desde el año 2021, y que sí han implementado varias comunidades gobernadas por el PP y VOX en su tramo autonómico, sí se habría logrado reducir la brecha real entre las pensiones y la subida desorbitada del IPC.
Precisamente, el IRPF fue uno de los debates principales del pasado lunes, al conocerse que la oposición exigirá al Gobierno ampliar el tramo exento de IRPF para que el Estado no se quede con casi la mitad de la subida del SMI impulsada por Yolanda Díaz, pese a estar teniendo una recaudación «histórica».
