No es una buena noticia la corrección de resultados a la baja de Eurostat del PIB del primer trimestre. La mayoría de los analistas económicos se fiaban de las predicciones del Fondo Monetario Internacional, de ahí la sorpresa del anuncio de que Alemania ha entrado en recesión técnica, con una inflación del 6,3%, que la coloca en una situación de estanflación.
Ahora Eurostat ha corregido los resultados del primer trimestre en la zona euro y, en consecuencia, hay dos trimestres seguidos de decrecimiento, por lo que se ha entrado en estanflación arrastrados por Alemania. Pero no sólo el país germano ha entrado en estanflación. Hay otros cuatro países que se encuentran en la misma situación.
Irlanda, después de que en el cuarto trimestre anunciase que había decrecido un 0,1%, dejó muy preocupado a la UE. No tanto por el peso que tiene en la economía europea, sino porque estaba siendo el país ejemplo en crecimiento.
Así, se nos anuncia que en el primer trimestre se ha producido una debacle en la economía irlandesa con una caída del 4,6% del PIB. Los motivos son tan claros como que la tecnológicas americanas en suelo irlandés están pasando muy malos momentos en sus negocios y que el país se ha visto afectado por dos trimestres de retrasos.
Las tecnológicas americanas están aplicando en Irlanda las mismas recetas que aplicaron en sus sedes centrales y están procediendo a despidos masivos de personal a la espera de la recuperación de sus negocios.
Es preciso señalar que Irlanda es el país que en dos trimestres consecutivos más ha decaído en su PIB, si bien su inflación está ligeramente por debajo de la media de la zona euro con un 5,1%.
Los tres países siguientes en entrar en estanflación son Lituania, Estonia y Hungría, todos ellos muy afectados por la situación con Rusia y por su proximidad a su frontera. Así tenemos que Lituania, con una inflación del 10,7%, su PIB en los dos últimos trimestres ha decrecido un 2,6%. Le sigue Estonia, con una inflación del 11,2% y una bajada de su PIB del 1,6%. Y a continuación está Hungría con una inflación del 24,5%. Su máximo se produjo en enero cuando llegó a 26,2% y desde entonces lleva una senda de reducción que en abril fue de 1,1 punto.
A partir de aquí tenemos cuatro países más que están en decrecimiento, Luxemburgo que está en un 1,7% negativo, pero con una inflación controlada en el 2,0%; y Chequia, Finlandia y Países Bajos, siendo esta última por su tamaño la más preocupante, pues en el primer trimestre ha decrecido el 0,7% y tiene una inflación del 6,8%.
Los tres mejores países de la Unión Europea son Portugal, con un crecimiento del 1,9% y una inflación del 5,4%; Croacia, con una subida de su PIB del 1,9%, si bien su inflación es de un 8,3%; y Letonia con una subida del 1,8%, pero siendo su inflación un 12,3%. Viene eso sí del 22% que tuvo en septiembre de 2022. Ha conseguido reducir diez puntos en ocho meses.
España está con un crecimiento del 0,9% y una inflación armonizada del 2,9%, aunque se cambiaron los pesos para calcular el IPC tanto en los alimentos como en la energía.
Italia, por su parte, ha pasado de decrecer un 0,1% en el último trimestre a crecer un 0,6% en el primer trimestre debido a que las medidas tomadas por Giorgia Meloni.