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EN EL SEGUNDO SEMESTRE DE 2022 SE CREARON EL 10% DE LOS AFILIADOS DE TODO EL AÑO

Los indicadores económicos que evidencian que la economía española se ha parado

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Senado. Europa Press

El «España va bien» se va a convertir en el mantra del discurso del Gobierno. «España es la locomotora de Europa, a España todos la admiran por haber conseguido colocarse en la cabeza de la economías mundiales», dirán. En las últimas semanas ningún diario afín a La Moncloa ha comunicado que México se ha colocado como potencia económica número 15 del mundo, desplazando a España de esa posición.

Esto quiere decir que, de 2004 a 2022, España ha pasado de la posición octava a la decimosexta, con 13 de 18 años de Gobierno socialista. Es lo que hay. Y es importante recordar que sólo con Sánchez la renta real per cápita de los españoles ha bajado el 4,1% y que España se ha convertido en el peor país de Europa y ocupa la posición 27 de 27 en este ranking. También que España en el 2020, al año de la pandemia, fue el país que más decreció en PIB de toda la UE y uno de los peores de toda a OCDE, con una caída del 11,3%. Y que la ministra de Economía prometió un crecimiento en V y en 2021, por las circunstancias de la inutilidad de este Gobierno, sólo se creció un 5,5%.

Así, es importante recordar que en el tercer trimestre del pasado año sólo crecimos un 0,1% en el PIB y que en tres trimestres lo hicimos en un 1,5%. Y la culpa la tuvo el «apuntador», en este caso el INE, por lo que se despidió a su presidente y se colocó a una amiga andaluza. Y todo esto no lo he leído en los diarios voceros del Gobierno, porque no quieren reconocer que lo han hecho muy mal.

Hoy voy a mostrar otra variable fundamental para saber cómo de caliente o fría está la economía. Según el Gobierno, está «ardorosa». Cuando la economía está caliente se crean puestos de trabajo y por ende afiliados a la Seguridad Social; en cambio, cuando una economía se está enfriando se pueden seguir creando, pero a mucho menor ritmo que cuando la economía bulle.

En 2021, la economía española se calentó, cosa totalmente lógica después del bofetón del 2020 donde nos colocamos al borde del precipicio. Así, en diciembre de 2021 se perdieron 23.006 afiliados a la Seguridad Social. Pues bien, en 2022 en el mismo mes se perdieron 79.244 afiliados. Este dato debería hacer reflexionar a todo el Gobierno y preguntarse por qué ha pasado, si es una señal de alarma de enfriamiento, que lo es, y qué hay que hacer para reactivar la economía.

Cabe señalar que en 2021 se consiguieron, a lo largo del año, 877.181 afiliados nuevos a la Seguridad Social y en 2022, 624.396. Esto significa que se lograron 252.785 afiliados menos que, vistos en porcentaje, suponen un 28,8% menos. Es decir, tuvimos un cuarto de millón menos de afiliados en el «año que nos estamos poniendo a la cabeza de Europa».

Si miramos los dos segundos semestres, la cosa se pone muy fría. Hemos pasado de hervir en 2021 a agua tibia en 2022. A la economía en lugar de ponerle gasolina de 98 octanos para que corra le hemos puesto cubitos de hielo para que se enfríe. En el segundo semestre de 2021, se crearon 423.292 afiliados que supusieron el 48,2% del total de la afiliación de 2021, pero resulta que en este mismo período de 2022 se crearon 64.969 afiliados en total, sólo el 10,4% de todo el año.

Con estos indicadores en la mano, la economía se ha parado, tiene frío y se está congelando… y todo con la mala noticia de que tenemos una inflación subyacente casi en el 7% y que para bajar esa inflación el BCE va a paralizar la economía.

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