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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Por qué es importante contar con un asesor financiero

La incertidumbre financiera que se vive desde hace algunos años genera, en las familias, una profunda intranquilidad por no saber cómo afrontar esta situación de la mejor manera. Para la mayoría de las personas, llevar un adecuado control de sus finanzas no es tarea sencilla, especialmente cuando el desconocimiento y la preocupación hacen que se pierda la perspectiva sobre qué hacer para manejar mejor su dinero. Con esas limitaciones, el cumplimiento de objetivos y metas a través del ahorro y la inversión suele ser complicado y con resultados muy poco alentadores. Es por ello que la figura del asesor financiero es un factor clave en estas circunstancias; su capacidad y experiencia es de vital importancia para conseguir la tan ansiada tranquilidad económica.
A diferencia de un vendedor de productos bancarios, el asesor financiero es aquel especialista que brinda orientación a las personas sobre el manejo adecuado de su dinero, con el fin de encaminarlas hacia el cumplimiento de sus objetivos en el corto, mediano y largo plazo. Es un profesional de las finanzas que se involucra desde el principio con las necesidades de sus clientes y los ayuda a definir el camino para vivir una vida libre de preocupaciones financieras. Su misión es, fundamentalmente, proponer las alternativas que mejor se adaptan a cada caso y a cada objetivo, así como transmitir confianza y seguridad a las familias para que tomen las decisiones más adecuadas en lo que respecta al manejo de sus ahorros.
Un coach financiero para las familias
La figura del asesor financiero emerge como la alternativa más conveniente para que las personas logren crecer en el aspecto económico, especialmente cuando no cuentan con los conocimientos necesarios para hacerlo. Su función principal es muy parecida a la de un entrenador de equipo: dirige, escucha, aconseja y orienta a sus clientes, acompañándolos en el momento en que deben tomar decisiones financieras. En una primera instancia, evalúa la situación financiera de la familia y sus expectativas de crecimiento económico a largo plazo. A partir de ahí, los ayuda a establecer metas de ahorro, ambiciosas y razonables, y les propone las mejores alternativas de inversión para que puedan alcanzarlas. El resultado: familias seguras y encaminadas hacia el cumplimiento de sus objetivos financieros.
La preparación y experiencia del asesor financiero junto a su marcada vocación de servicio son los factores más importantes en el momento de guiar a sus asesorados en el cumplimiento de sus objetivos y metas. Desde hace 36 años, el Banco Mediolanum desarrolla sus operaciones con asesores financieros, a quienes forma y prepara para que puedan ayudar a diseñar su camino a las familias de acuerdo a sus propios objetivos de vida. Denominados Family Banker, son quienes acompañan a los ahorradores para ayudarlos a resolver sus necesidades de planificación económica y a seguir una estrategia de crecimiento seguro.
Establecer las directrices para un ahorro sostenido en el tiempo, diversificar adecuadamente las inversiones, elegir los productos y herramientas adecuadas para obtener los mejores resultados en materia económica y disminuir el riesgo de pérdida, son solo algunos de los beneficios de contar con un Family Banker en casa. La presencia de este coach financiero en las familias se perfila como una de las mejores alternativas que ofrece la banca personal para el cumplimiento de las metas y el bienestar económico a nivel familiar.

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