El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha denunciado que lo único que quiere el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es «comprar líneas editoriales de medios de comunicación»: «Es el colmo que venga al Congreso y hable de discernir entre la verdad y la mentira cuando ha estafado y ha mentido brutalmente a los españoles en dos legislaturas consecutivas».
«¿En qué ha convertido usted la mentira? En un modo de permanencia en el poder a cualquier precio». El Gobierno y el partido más corrupto de la democracia no pueden hablar de calidad democrática», ha agregado, antes de reiterar que Sánchez tiene a su esposa imputada por corrupción.
«¿A cuántas empresas cotizadas que dependen de su regulación pública llamó usted personalmente para que recibieran a su esposa? Suba aquí (a la tribuna del Congreso) y atrévase a decir que no llamó a ninguna. Es capaz, lo sé», ha manifestado después de que el empresario socio de Gómez, Carlos Barrabés, declarara ante un juez que Sánchez estuvo presente en dos reuniones mantenidas con su esposa en La Moncloa.
«El Gobierno del señor Sánchez está hundido en la corrupción económica, familiar y partidaria, en la corrupción política que representa la ley de amnistía con la que ha comprado su investidura y en la corrupción institucional que representa el asalto al TC que ha servido para garantizar la impunidad de los ERE y salvar a dos presidentes del Partido Socialista», ha subrayado.
El líder de VOX ha trasladado al PP que «no es ético ni estético» llegar a acuerdos con el PSOE, que se repartan el CGPJ, el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas, RTVE, la Junta Electoral Central, las comisiones parlamentarias en el Congreso y el Senado, «además de los sillones en Bruselas».
Sobre todo, ha afeado que PP y PSOE «fingen discutir sobre calidad democrática» cuando «se han repartido los jueces cromos», a la vez que han acordado aumentar el número de políticos en Castilla-La Mancha «cuando hay una deuda y un déficit permanente en las administraciones públicas, y el pueblo español sufre», y semanas después de votar a favor de regularizar a 500.000 inmigrantes ilegales que no cumplen la ley de extranjería: «La ley en España sólo es para los españolitos corrientes que pagan impuestos y que están hasta el cuello». «Y tienen comprados, unos y otros, a todos los medios de comunicación del país, en ayuntamientos, en regiones y desde el Estado».
