«El diálogo en sí mismo se ha convertido en un objetivo político de primer orden», ha dicho Batet sobre Cataluña.
La ministra de Política Territorial y Función Pública y secretaria de Impulso Federal del PSC, Meritxell Batet, ha considerado que para «superar la crisis institucional» y, en especial, la «territorial» que vive el Estado es necesaria una reforma de la Constitución «urgente, viable y deseable».
«Es viable y estamos preparados para ella. Somos una democracia consolidada con la fortaleza suficiente para afrontar una reflexión profunda conjunta», ha defendido Batet en la inauguración de la jornada «Reforma constitucional, federal y con derechos» celebrada en la sede del PSC de Barcelona, en el que ha sido su primer acto como ministra.
Ha incidido en la «necesidad de renovar el pacto territorial de España» que, ha afirmado, «está en crisis, no se le escapa a nadie y nadie lo puede negar», y ha indicado -en alusión sobre todo a Cataluña- que «el diálogo en sí mismo se ha convertido en un objetivo político de primer orden».
La ministra ha llamado a las distintas fuerzas políticas a aprovechar la Comisión de Reforma del Modelo Territorial del Congreso impulsada por los socialistas a finales del año pasado, y ha afirmado que la «salida» a la crisis catalana exige «confianza y lealtad entre gobiernos».
«La política del siglo XXI necesita escuchar, dialogar y consensuar«, ha asegurado Batet, que ha subrayado que España debe superar «una situación de más de cinco años sin auténtico diálogo ni política institucional» y ha afirmado, en referencia de nuevo a Cataluña, que «las demandas ciudadanas no pueden agotarse en la aplicación de la ley y la Constitución, cosa que por otra parte es fundamental».
Preguntada posteriormente por los periodistas sobre qué acuerdos se pueden alcanzar entre los ejecutivos catalán y estatal más allá del respeto a la legalidad, se ha mostrado abierta a retomar las 45 demandas presentadas al Gobierno por el expresidente catalán Carles Puigdemont -la número 46 era la relativa a la autodeterminación- o a estudiar leyes aprobadas por el Parlament y que han sido declaradas inconstitucionales.
Ha sentenciado, en este sentido, que «hay una infinidad de decisiones políticas que se pueden tomar». «El diálogo entre instituciones exige que cada gobierno, desde sus prioridades políticas, sea consciente de su obligación de reconocer, proteger e integrar las diferentes posiciones y sensibilidades de todos los ciudadanos de su comunidad política», ha añadido.
Batet ha dicho que espera que todas las instituciones autonómicas actúen en «la línea» marcada por el Gobierno de Sánchez y que participen en los respectivos órganos de «coordinación y participación», entre los que ha citado la Conferencia de Presidentes y el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Partidaria del acercamiento de presos
Se ha mostrado partidaria del acercamiento a Cataluña de los políticos independentistas encarcelados aunque destaca que esta posibilidad no está en manos del Ejecutivo sino del juez instructor ya que no hay condena firme.
«No está en manos del Ejecutivo porque no hay condena firme; al estar en prisión provisional es decisión del juez. Está bien que lo pidan y yo vería con buenos ojos el acercamiento a Cataluña, pero es decisión del juez», asegura en una entrevista con El Periódico de Cataluña, la primera que concede como ministra.
‘El levantamiento del control es acertado’
El secretario de organización del PSC, Salvador Illa, ha considerado acertada la decisión del Gobierno de levantar la supervisión sobre las cuentas de la Generalitat y espera que el gobierno catalán sepa responder a este gesto en beneficio de un diálogo desde la aceptación del marco legal.
Illa cree que esta decisión sobre la supervisión de las cuentas de la Generalitat es procedente después de haberse levantado el mecanismo constitucional del 155 ya que, ha dicho, «no se debe actuar con presunciones contra un gobierno nuevo» -el catalán- que cuenta con sus propios mecanismos de control.
Según ha afirmado el dirigente del PSC en una entrevista al programa Converses de COPE-Catalunya, esta medida es una muestra de que el Gobierno hará todo lo posible en favor del diálogo entre Cataluña y el resto de España y entre sus gobiernos, respetando las respectivas posiciones y siempre de la aceptación del marco legal vigente.
A su juicio, las bases de este diálogo deben partir primero de una «normalización» de la situación en Cataluña mediante la generación de un «clima de respeto» hacia a la pluralidad, en la que, considera que, entre otros actores, los medios de comunicación públicos pueden jugar un papel importante.