El fondo de inversión más grande del mundo, BlackRock, ha dado un paso más en su estrategia de crecimiento en el sector inmobiliario en España, enfocándose en el mercado residencial para estudiantes en Madrid. En su última operación, ha adquirido una participación en la gestora del complejo de residencias Emilia Pardo Bazán, ubicado en la Ciudad Universitaria. Este acuerdo permite a BlackRock asumir el control del complejo, que anteriormente estaba en manos de Global Student Accommodation (GSA) y, previamente, del fondo luxemburgués Corestate. La residencia cuenta con aproximadamente 300 camas y está valorada en 50 millones de euros, según adelanta el diario Vozpópuli.
Este interés responde a las perspectivas de revalorización de los activos inmobiliarios en un contexto europeo de tipos de interés más bajos y en un mercado como el español, que enfrenta un notable déficit de oferta de viviendas.
Parte de estas inversiones podrían beneficiarse de los fondos ESG y de impacto social que BlackRock ha lanzado en Europa y Reino Unido. Esta expansión podría incluir proyectos de vivienda asequible, como sugirió Adolfo Favieres, director inmobiliario de BlackRock en España, en un reciente foro inmobiliario.
La operación en la Ciudad Universitaria es la segunda transacción residencial de BlackRock en España desde 2023, tras la compra de un edificio en la calle María de Molina 50 junto a Grupo Lar. Adquirido al Ministerio de Hacienda por cerca de 205 millones de euros, el edificio alojará un proyecto de viviendas premium y una residencia para estudiantes, sumando una inversión total de aproximadamente 400 millones de euros, con el apoyo de Banco Santander.
Con un horizonte inversor hasta 2030, BlackRock busca aprovechar el crecimiento del mercado, ofreciendo opciones de vivienda que abarcan desde alojamientos para estudiantes hasta residencias de alta gama.
