Gordillo ha mostrado siempre su respaldo al «procés» que ha fracturado a la sociedad catalana y ha motivado la salida masiva de empresas.
El alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez Gordillo, ha reconocido sin tapujos la politización de la cabalgata de los Reyes Magos de este viernes y ha asegurado a través de las redes sociales que contará con tres reinas magas, elegidas entre 25 candidatas, y llevará en la cabecera una bandera palestina «por la defensa del masacrado pueblo palestino» y un lazo amarillo para pedir la libertad de los golpistas encarcelados.
Gordillo ha mostrado siempre su respaldo al «procés» que ha fracturado a la sociedad catalana y ha motivado la salida masiva de empresas. El pasado mes de septiembre, colgó la «estelada» en la fachada del Ayuntamiento y retiró las enseñas de España y de Andalucía. «Mantendremos la bandera hasta que termine el proceso de independencia», afirmó, antes de asegurar que «Andalucía es tan nación como Cataluña o más».
La de Marinaleda no será la única cabalgata politizada. Además de la de Puente de Vallecas, que contará con una «drag queen» -autodenominada La Prohibida- que manifestó en varias ocasiones su rechazo hacia la conmemoración del nacimiento del Hijo de Dios -«detesto la Navidad», dijo-, la ANC pidió esta semana en Manresa a los adultos que acompañen a sus hijos a la cabalgata que lleven «ropa amarilla o algún símbolo amarillo», con el objetivo de dejar constancia «de la reclamación de «libertad para los presos políticos y el retorno de los políticos exiliados», a pesar de que esta sea «una fiesta especialmente dirigida a los niños».
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