La Audiencia Nacional ha condenado a los etarras Liher Aretxabaleta -detenido este lunes en Bilbao- y Alaitz Aramendi Juanarena a 535 aƱos a cada uno como autores de un atentado con furgoneta bomba en distrito madrileƱo de San Blas, el 25 de mayo de 2005, que al estallar hirió directamente a 45 personas, 14 de ellas policĆas.
Liher Aretxabaleta ha sido detenido por la Guardia Civil en Bilbao por orden de la Audiencia Nacional para la ejecución de la sentencia, mientras que Alaitz Aramendi cumple condena en Francia.
En la sentencia, la sección segunda de la Sala de lo Penal da por probado que, en la noche del 24 al 25 de mayo de 2005, ambos acusados se desplazaron a la localidad madrileƱa de El Escorial para robar un vehĆculo con el fin de colocarle un explosivo y cometer un atentado en Madrid.
AllĆ, tras forzar sin Ć©xito un Renault 5, sustrajeron una furgoneta Renault Express y se dirigieron al municipio cercano de Valdemorillo, donde prepararon un artefacto de entre 18 y 20 kilos de mezcla explosiva y lo depositaron en el maletero del vehĆculo.
Posteriormente, dejaron el vehĆculo aparcado a la altura del nĆŗmero 4 de la calle Rufino GonzĆ”lez, esquina con la calle AlcalĆ”, en el distrito de San Blas, Ā«con el fin de causar el mayor daƱo material posible y ocasionar la muerte o lesiones a las personas cercanas al lugarĀ».
A las 8.45 horas del 25 de mayo, un hombre llamó al diario «Gara» en San SebastiÔn y tras decir que hablaba en nombre de ETA, alertó de que a las 9.30 iba a explotar una furgoneta Renault Express en ese lugar, sin aportar ningún dato mÔs.
A la hora prevista la furgoneta explotó, provocando lesiones, fundamentalmente traumas acĆŗsticos, a los policĆas y viandantes que se encontraban en las inmediaciones, ademĆ”s de causar numerosos desperfectos en vehĆculos y edificios colindantes, por lo que tambiĆ©n han sido condenados a indemnizar a sus vĆctimas por un total de casi medio millón de euros.
Las indemnizaciones a los policĆas van de 60 a 2.000 euros y para los demĆ”s heridos oscilan entre 600 y 45.300, mientras que por los daƱos las cantidades abarcan de los 27,40 euros a los 10.936 euros.
AdemƔs deberƔn tambiƩn indemnizar al Ayuntamiento de Madrid con 407.578 por los daƱos en el pavimento, en el arbolado y los desperfectos en diferentes inmuebles.
La principal prueba para condenarles es el perfil de ADN de Liher Aretxabaleta hallado en un Renault 5 que fue forzado en El Escorial la misma noche en que robaron la furgoneta Renault Express, ya que no parece Ā«concebibleĀ» que varios integrantes de ETA Ā«intentarĆ”n sustraer los referidos vehĆculos en las mismas circunstancias de tiempo y lugar sin que exista una estrecha conexión entre los mismosĀ», argumenta el tribunal.
A ello aƱade el hecho de que agentes de la PolicĆa municipal de Valdemorillo observaron la presencia de un vehĆculo sospechoso y al verlos una mujer, presuntamente la otras acusada, les saludó y les dijo que venĆan de Ćvila y se dirigĆan a Madrid, momento en el que vieron en el asiento del conductor a un hombre corpulento, moreno y de pelo corto.
Tras el atentado y conocerse que el vehĆculo de esa pareja coincidĆa con el de la furgoneta bomba, fue inspeccionado el paraje en el que se produjo ese encuentro y allĆ hallaron Ā«material susceptible de haber sido empleado en la confección de algĆŗn artefacto explosivoĀ«, una botella de agua y tres bolsas de basura.
Lo que, segĆŗn la sentencia, permite concluir que las Ā«dos personas, hombre y mujer, que fueron interceptados por los agentes de la policĆa municipal de Valdemorillo, eran los mismos que previamente habĆan sustraĆdoĀ» la furgoneta en El Escorial.
La Sala afirma que esta «convicción» no puede considerarse «arbitraria» sino «por el contrario concurre sobre tal extremo prueba de cargo suficiente», ya que el perfil genético de Arachavaleta fue hallado no solo en el Renault 5 sino también en la botella de agua encontrada en Valdemorillo.
La condena impuesta son 210 aƱos de cĆ”rcel por 14 delitos de asesinato terrorista intentado, en su modalidad agravada, por los policĆas heridos, y 310 aƱos por otros 31 delitos de asesinato terrorista intentado, a lo que se suma una pena de 15 aƱos por estragos terroristas en concurso con tenencia de explosivos.
Los dos etarras ya habĆan sido condenados en Francia por delitos de terrorismo y tenencia ilĆcita de armas, de hecho, Alaitz, cumple allĆ una condena de 18 aƱos impuesta en 2011.
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El sanguinario etarra āKubatiā seƱala que āno van a colaborarā para esclarecer los asesinatos pendientes