El antiguo Colegio Fernán Caballero, situado en el barrio de San Diego (Vallecas), ha sido desalojado tras convertirse en un foco de inseguridad e insalubridad para los vecinos. Según fuentes policiales, el edificio llevaba años okupado por personas sin hogar y consumidores de drogas. En su interior se producían robos menores, peleas y situaciones de riesgo. De hecho, hace apenas dos semanas, un hombre perdió parcialmente una mano tras ser atacado por intentar robar una dosis.
Ante esta situación, a primera hora del martes, técnicos de la Junta Municipal de Vallecas han acudido al inmueble para evaluar su estado estructural y sus condiciones higiénico-sanitarias. La inspección preliminar fue suficiente para activar la alarma: en el interior se encontraron condiciones extremadamente insalubres y un elevado riesgo de incendio. En ese momento, nueve personas se encontraban en el recinto, y fueron desalojadas de forma inmediata.
El perfil de los ocupantes era diverso, dos españoles, un cubano, un marroquí y cinco personas de origen subsahariano. La mayoría compartía una adicción a sustancias estupefacientes. «Dentro estaba el hombre que había perdido parte de la mano, aún con el vendaje, y junto a él, la novia del agresor. Este último está en prisión en Soto del Real», han detallado los agentes, que también han señalado que varios de los desalojados tienen antecedentes por robos violentos.
En el caso de las mujeres, algunas ejercían la prostitución «a cambio de pequeñas cantidades de dinero o por una dosis de droga». Tras el desalojo, han comenzado los trabajos para tapiar con cemento y ladrillos todas las entradas y ventanas del edificio. También se ha llevado a cabo una limpieza parcial del exterior, aunque se prevé una intervención más profunda en el interior, donde se han encontrado ratas y otros signos evidentes de abandono.
