El segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento de Mora de Rubielos y miembro del PAR, Rafael Vicente, ha presentado su dimisión debido a su desacuerdo con la llegada inminente de 110 inmigrantes ilegales a esta localidad turolense. El contingente, que viene desde Canarias, se instalará en el municipio en los próximos días, aunque aún no se ha concretado la fecha exacta de su arribo.
Vicente expresó su malestar este viernes, calificando de «falta de consideración espectacular» el hecho de que el Ayuntamiento no fuera informado oficialmente desde el principio sobre la llegada de los refugiados. En su opinión, recibir a más de 100 inmigrantes en una población de 1.600 habitantes, lo que representa aproximadamente un 7% del total, es una carga difícil de manejar. Comparó la situación con lo que podría suceder en regiones más grandes como Cataluña, Valencia o Zaragoza, imaginando cómo reaccionarían si les llegaran 100.000 personas de otro continente.
El concejal ha argumentado que la llegada de los refugiados alterará la tranquilidad y el estilo de vida tradicional de los residentes. Además, criticó duramente a las administraciones por, según él, no invertir en la zona. «No hay fondos para la residencia de mayores, ni para el embalse de las Tosquillas, ni para el tren, pero sí para mantener a estos refugiados», manifestó con visible enfado, añadiendo que la situación «complica la vida a los pueblos humildes».
Hugo Arquímedes Ríos, alcalde de Mora de Rubielos y compañero de partido de Vicente, intentó en varias ocasiones persuadir al edil para que no renunciara a su cargo, pero no tuvo éxito. Ríos señaló que las razones de Vicente para dimitir son «muy personales» y afirmó que, aunque respeta su decisión, es evidente que el motivo principal es su oposición a la llegada de los refugiados. Tras la dimisión, se espera que el siguiente en la lista del PAR asuma el puesto vacante.
Mientras tanto, los inmigrantes ilegales se alojarán en el Hotel Mora durante aproximadamente cuatro meses, un periodo en el cual recibirán asistencia para su integración laboral y se les enseñará el idioma.
Por otro lado, el partido VOX había organizado una concentración para este sábado en protesta por la acogida de los refugiados malienses en el municipio. Sin embargo, la Subdelegación del Gobierno en Teruel ha prohibido la manifestación, alegando que la solicitud se presentó fuera del plazo requerido.
