El policía nacional de 32 años fuera de servicio que casi triplicaba la tasa de alcoholemia y que embistió el sábado a una furgoneta en la M-45 en Madrid, causando la muerte de su conductor de 49 años, declará en las próximas horas ante la Guardia Civil después de recibir el alta hospitalaria.
Según las mismas fuentes, está previsto que este martes reciba el alta hospitalaria y que la Guardia Civil le tome declaración para aclarar las circunstancia del siniestro, ocurrido el pasado sábado en torno a las 23:00 horas en el kilómetro 7 de la M-45.
En este punto, un policía municipal fuera de servicio intercepta con su coche particular a una furgoneta que circula haciendo zig-zag por la vía. El conductor de este vehículo se detiene ocupando parte el carril derecho de la vía de circunvalación.
Minutos después el conductor de un tercer coche, conducido por un policía nacional de 32 años que viajaba con otro compañero de 26, ambos fuera de servicio, embiste a la furgoneta.
En el interior se encuentra el conductor de 49 años, que queda atrapado y finalmente muere después de que los servicios no logren revertir la parada cardiorrespiratoria.
El agente fuera de servicio da positivo en alcohol con una tasa de 0,75 miligramos en la primera prueba y de 0,73 miligramos en la segunda, es decir prácticamente el triple del límite permitido (0,25), lo que supone la imputación de un delito contra la seguridad vial.
La investigación abierta por la Guardia Civil determinará si a este delito se le suma algún otro por la muerte del conductor de la furgoneta.
Los dos policías nacionales que viajaban en el coche implicado en el accidente pertenecen a las últimas promociones del cuerpo, por lo que habían jurado como policías nacionales hace poco tiempo.