El Partido Popular de Cataluña ha compartido en sus redes sociales una imagen acompañada de un mensaje animando a los inmigrantes catalanes a votarles el 12 de mayo: «Los inmigrantes en Cataluña decidimos en estas elecciones. Hagamos una Cataluña de primera, en paz y unida. Esta vez, tu voto lo cambia todo», han escrito en X (antes Twitter).
Un día después, ante las numerosas críticas de usuarios que no daban crédito, los populares decidieron eliminar la publicación. Pero las reacciones siguen presentes en la red social: «Pensaba que era una cuenta parodia».
No es la primera vez que el PP lanza guiños al colectivo de inmigrantes que su electorado no logra entender. Recientemente, con motivo del sexto aniversario de los atentados islamistas en las Ramblas, Daniel Sirera (portavoz popular en Barcelona) compartió un mensaje en árabe en sus redes sociales. También fue polémica su respuesta a un usuario que le recordó el resultado electoral en 2021 ya que lo tildó de «facha».
Por si fuera poco, el año pasado también abrazó las ideas del progresismo defendiendo que el PP era partidario de empadronar a todos los inmigrantes sin papeles (ilegales): «No podemos incumplir la ley, pero es una obligación moral y ética», explicó en un acto de ‘Taula del Tercer Sector’, directamente vinculado a la Agenda 2030.
Y es que desde VOX han querido poner el debate sobre la inmigración ilegal por la inseguridad creciente que sufre Cataluña. Actualmente, y según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), se trata de la comunidad autónoma con más nacimientos de madres extranjeras: un 43% en 2022; superando la media de España en más de un 10%.
Para Ignacio Garriga, el buenismo de la izquierda y el separatismo han convertido a Cataluña en «la región de España con mayor efecto llamada» favoreciendo a las mafias y multiplicando las muertes en el Mediterráneo. Además, ha anunciado cuáles serán sus primeras medidas a tomar en caso de liderar la comunidad autónoma: «Cortar de raíz las políticas sociales destinadas a inmigrantes ilegales: ni un piso de protección oficial y ni un euro de la Renta de Garantía de Ciudadanía».
