El Partido Popular ha descartado de forma clara cualquier intención de citar a Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, en la comisión de investigación del Senado que investiga los casos de corrupción relacionados con el PSOE. En su lugar, ha confirmado que será el propio Sánchez quien deberá comparecer, aunque la fecha exacta la revelarán en septiembre.
Esta novedad, revelada en rueda de prensa por el portavoz del partido, Borja Sémper, choca con el relato que se había mantenido en Génova 13 de «total oposición» al sanchismo cuando más fuerte le están sacudiendo presuntos casos de corrupción. De hecho, Begoña Gómez está imputada en estos momentos por delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Eso sí, basándonos en las revelaciones del empresario Carlos Barrabés ante el juez, Sánchez también podría estar implicado en este caso ya que se vieron a solas en la Moncloa en más de una ocasión.
Sin embargo, desde el PP han dejado meridianamente claro que la labor del partido es ejercer oposición al Gobierno, y que por tanto, es Sánchez quien debe rendir cuentas, no su esposa. «No hacemos oposición a Begoña Gómez. Ella dará explicaciones ante el juez», ha subrayado Sémper. También ha reiterado que el objetivo del PP es centrarse en el papel del presidente en «negocios de terceros» y en el uso de Moncloa para reuniones con empresarios relacionadas con la financiación de su cátedra en la Universidad Complutense.
El PP llevaba tiempo evitando pronunciarse sobre la posibilidad de interrogar a Gómez en la comisión del Senado, pero ahora ha cerrado definitivamente esa opción, reafirmando que su enfoque está en Sánchez y no en su entorno familiar.
