El juez de la Audiencia Nacional que instruye el caso Koldo envió este miércoles al Tribunal Supremo la causa al completo al tiempo que ha instado a que se investigue al diputado y exministro de Transportes José Luis Ábalos «en tanto que ocupaba un papel principal en el entramado».
Apunta a la comisión de un delito de pertenencia a organización criminal y señala a Ábalos por un delito de tráfico de influencias.
El exministro, por su parte, se dirigirá al Tribunal Supremo en los próximos días para solicitar que le permitan presentar alegaciones a la exposición razonada que ha elevado la Audiencia Nacional interesando su imputación en el caso Koldo. Ábalos «está deseando poder defenderse» porque hasta ahora, con las continuas filtraciones del caso que hacían referencia a su posible papel en la gestión de esos contratos para la compra de mascarillas estaba sufriendo una «absoluta indefensión».
Según estas fuentes, el exministro, tras revisar la exposición razonada del magistrado de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, entiende que no aporta nada nuevo a lo que ya recogió la Fiscalía Anticorrupción y el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
Pero la cuenta atrás para que el Tribunal Supremo le impute por su «papel principal» en una organización criminal ya ha comenzado. Los socialistas votarán a favor del suplicatorio, la petición de la autoridad judicial a la Cámara para enjuiciar a uno de sus miembros, y quieren hacerlo «cuanto antes», en 15 días. Según las previsiones de La Moncloa, el suplicatorio podría votarse en dos o tres semanas.
Desde Ferraz sostienen que los argumentos dados por Ábalos y los documentos remitidos para sustentar su defensa han quedado «caducados» y superados por los nuevos señalamientos.